Paco Pazos, el hijo de Valentín, traslada la propuesta al Concello
21 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.No serán muchos los pontevedreses que pongan cara a Valentín Pazos. Pero si se les habla del castañero de A Ferrería, seguro que sí saben de quién se trata. No en vano Valentín, «o rei das castañas», acudió puntual a su cita otoñal con los pontevedreses durante nada menos que 62 años. Son varias la generaciones de vecinos y visitantes de esta ciudad que compraron castañas en su puesto callejero.
Ayer se cumplían justamente seis años y medio desde la muerte de Valentín, y su hijo Paco, que heredó aquella vieja locomotora en la que todavía se asan los frutos del otoño quiso aprovechar la efeméride para registrar en el Concello las 4.228 firmas que ha recogido en los últimos años demandando que se instale en A Ferrería un monumento dedicado al castañero. ¿Porque seis años y medio? Pues porque así la fecha coincide en pleno otoño, cuando el olor a castañas asadas vuelve a inundar la ciudad.
Paco lleva también 40 de sus 50 años sirviendo castañas a los pontevedreses y es una persona bien conocida en la ciudad. Por la locomotora, por su pasión por el Pontevedra CF, por su dedicación a los niños... Recuerda que ya en vida de su padre se habló de erigir la estatua dedicada al castañero, que incluso en el Concello se barajó algún diseño pero nunca salió adelante. Desde el fallecimiento de Valentín, su hijo se tomó el recuerdo de la memoria del castañero como una misión personal, y ayer cerró una etapa presentando las más de cuatro mil firmas en el Concello. «Ahora les toca a ellos -en referencia al gobierno local- tomar la decisión. Mi trabajo está hecho»