El sector explora el potencial de que la fibra forestal supla a plástico y algodón

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Ramón Leiro

Los especialistas destacan proyectos en marcha que beneficiarán al monte gallego

14 nov 2018 . Actualizado a las 05:05 h.

El sector forestal gallego mira al futuro y aprovecha las nuevas tecnologías para impulsar proyectos revolucionarios como explorar el potencial de la fibra forestal como sustituta de los plásticos y del algodón, lo que supondrá una relevante mejora ambiental, exportable a nivel mundial. Esta es una de las conclusiones de un foro celebrado en la sede de AFundación, en Pontevedra, ayer por la mañana, impulsado por La Voz de Galicia, y con un panel por el que pasaron el profesor de la Escola de Enxeñaría Forestal de la UVigo, Enrique Valero; el director territorial de Ence, Antonio Casal; el gerente del Clúster da Madeira e o Deseño de Galicia, Ricardo González; y el secretario xeral de Asefoga, Jacobo Feijoo. Moderó la mesa el periodista y articulista Eugenio Giráldez.

Los representantes del sector forestal quieren desprenderse de la imagen anticuada que todavía existe en algunos ámbitos sociales y políticos, y aprovecharon para exponer toda una batería de iniciativas que se están desarrollando o que se pueden llevar a cabo en Galicia.

Entre los ponentes hubo, eso sí, una total coincidencia en el sentido de que todavía hay un largo margen de crecimiento económico y científico. El monte gallego es más que un mero acumulador de madera. Es una fuente de riqueza que hay que saber manejar bien y, precisamente, los portavoces del Clúster da Madeira y de Asefoga instaron a las Administraciones públicas a contar con ellos, con los propietarios de los bosques -particulares y comuneros- y con los transformadores para fijar la estrategia de futuro.

Hacia la industria textil

El docente e ingeniero forestal Enrique Valero indicó que es necesario actuar en base a cuatro ejes, denominados las cuatro efes por sus iniciales en inglés, alimentación, comida, fuel y fibra. En este último capítulo, destacó que empresas como la gallega Inditex son pioneras. Esta firma «empieza a introducir fibras forestales y agrícolas en lugar de fibra sintética» en sus productos. En una línea también novedosa se encuentran los estudios sobre el aprovechamiento de la miel de eucalipto, aplicable, por ejemplo, a la industria cosmética.

Jacobo Feijoo de Asefora añadió que este cambo de investigación es también muy prometedor desde el punto de vista de los recursos hídricos porque, por ejemplo, reduciría la elevada dependencia del algodón. Resaltó que «el algodón consume mucha agua» y es un problema al que hay que buscar alternativas. También ofrece el sector forestal el uso comercial del xilitol, «que tiende a sustituir al azúcar como elemento endulzante». Y resaltó el uso de estratos de biomoléculas para su uso en la industria cosmética y farmacéutica.

Antonio Casal añadió que Ence también está aportando su grano de arena a un uso innovador de la producción forestal, con un programa de I+D en colaboración con otras instituciones de España en el ámbito de las nanotecnología a partir de la celulosa.

«Tremenda oportunidad»

En este sentido, la bioeconomía es «una oportunidad tremenda para dar un gran valor añadido al monte y para lograr una sociedad más equilibrada», precisó Casal. Un futuro esperanzador si las cosas se hacen bien y una forma de revalorizar el papel que el monte tuvo siempre en Galicia, un objetivo para el que es imprescindible que las Administraciones consulten y hagan caso a propietarios, transformadores e industria al fijar las estrategias de desarrollo del sector para las próximas décadas. «Para combatir el abandono del rural hay que dar soluciones a los propietarios del monte, sin olvidar los aspectos ambientales. Yo estoy convencido de que es un sector con futuro», resaltó González.