Segunda B El máximo goleador granate se somete hoy a las pruebas médicas para conocer el alcance de la lesión en el gemelo
06 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El Pontevedra no levanta cabeza. Cuando mejor le estaban saliendo las cosas en el campo, más jugadores empieza a sumar a su enfermería. El último en unirse a esta nómina de desdichas es Mikel Arruabarrena, máximo goleador del equipo y uno de los jugadores en los que Luismi confía la ofensiva granate. A la espera de que hoy se conozca el alcance de la lesión, Mikel se encontraba ayer dolido con la situación: «Estoy fastidiado, puede que al final no sea nada, pero me duele y me molesta», explicaba ayer el delantero.
En el minuto diez de juego comenzó a sentir molestias en el gemelo de la pierna derecha y a medida que avanzaba el partido veía como empeoraba, lo que al filo de la media hora de juego le llevo a pedir el cambio al banquillo. «Me quité tan rápido por precaución, si podemos evitar que sea una lesión de dos semanas y pico, mejor. Conozco mi cuerpo», indica Arruabarrena, que extrae una lectura para la esperanza en medio de tanto desánimo. Nota también sobrecarga en el gemelo izquierdo, lo que puede llevar a pensar que se trate solo de eso, de exceso de trabajo del músculo y no de una rotura. En su carrera deportiva no ha sufrido ninguna lesión en esta zona, pero sí reconoce que en pretemporada tras una lesión en los dedos del pie empezó a apoyar diferente y tuvo que estar apartado del equipo siete u ocho días.
El club cruza ahora los dedos esperando que el diagnóstico de hoy resuelva que se trata de una lesión pasajera y que en unos días pueda volver a las sesiones con sus compañeros. En la enfermería están Alex Fernández, Romay, que se perderá el partido con su ex equipo este fin de semana, Churre y Nacho López. El asturiano no logró recuperarse para el último encuentro en Guijuelo y supuso la cuarta pieza de una lista de bajas, que obligó a replantear el juego a Luismi.
La estocada de Arruabarrena puede ser dolorosa, ya que el delantero vasco es el máximo goleador del equipo y es el que juega de nueve puro con Javi López, Pedro, Alex González o Javi Pazos por detrás. Con su lesión son cinco las bajas del Pontevedra, dos de ellas en la defensa, otras dos en el medio del campo y ahora, Mikel en punta.