«Ni la mía ni la primera de Castro fueron tarjetas», dice Adrián León
PONTEVEDRA CIUDAD
El partido del Pontevedra en Burgos dejó polémica en ambos equipos. Los locales vivieron la destitución del técnico José Manuel Mateos tras la derrota en El Plantío, mientras que los granates perderán por doble amarilla a Adrián León y David Castro en el partido del próximo domingo en Pasarón ante el Salamanca.
En ambos casos las sanciones son más que dudosas, pero la de León se produjo cuando ya estaba en el banquillo. «Yo solo le dije al árbitro que el balón no había salido fuera, pero me sacó la tarjeta igual, no insulté ni fui ofensivo», recalca el central cántabro, que asegura que desde su posición tenía una buena visión del terreno de juego y vio como el balón no salió por la banda, a pesar de que Mateos interviniese al considerar que estaba fuera. «Ni la mía ni la primera de David Castro fueron tarjetas», explica León, que ayer pidió el cambio por molestias en una pierna.
El recurso, en el aire
Por el momento el Pontevedra no ha tomado ninguna decisión sobre si recurrirá o no las sanciones. De mantenerse las tarjetas de ambos, el Pontevedra no podrá contar el próximo domingo con ninguno de los centrales del equipo ni con Alex Fernández, que es la segunda semana que está apartado del equipo por una rotura muscular. Las consecuencias de las sanciones empañan el buen hacer de los granates, que llevan ya cuatro jornadas sin que les encajen un gol. Mantienen la portería a cero desde el partido del 1 de octubre ante el Celta B. Desde entonces ni el Fuenlabrada, ni la Ponferradina, ni el Burgos lograron batir a Edu.