Los estudiantes logran esquivar los precios de la burbuja del alquiler

lucas méndez / carlos riande / L. B. PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Destacan las facilidades de vivir en el centro de la ciudad y los precios «asumibles»

14 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Finalizado el curso universitario, llegan nuevos estudiantes a la ciudad de Pontevedra junto a otros que continúan con sus estudios. Por un lado existe un déficit de residencias universitarias: una pertenece a Afundación, está ubicada en la Avenida de Vigo y continúa abierta, pero no tiene convenio con la Universidade. Y la otra era La Peregrina, que sí tenía un acuerdo con la UVigo, pero que cerró el año pasado por jubilación. Por el otro lado, la relativa lejanía entre el campus universitario y el centro, hace que muchos estudiantes se decanten por buscar alojamiento en la zona céntrica en la que disponer de más servicios. Esta es una realidad que confirman también agencias inmobiliarias: «Los estudiantes prefieren estar cerca de todo, además por precios que no suelen variar con los años», comenta José Gómez, agente inmobiliario.

Todos los estudiantes destacan las facilidades de pago y que se trate de alquileres que no pongan en peligro la economía estudiantil. En contraste con la realidad en otras ciudades, Pontevedra no goza de un ambiente estudiantil demasiado grande ni ruidoso, con lo cual los caseros no suelen poner grandes problemas a la hora de alquilar los inmuebles. «Salvo casos puntuales, que no suelen ser habituales, nunca hemos tenido problemas con estudiantes ni caseros» admiten desde la inmobiliaria Micasa.

Con todo, siempre suele haber alguna dificultad a la hora de encontrar a la primera un piso en condiciones, ya que muchos estudiantes destacan que sigue existiendo una oferta de inmuebles en malas circunstancias. Ejemplos recurrentes son las humedades en el techo o edificios sin calefacción. Los estudiantes también admiten que la facilidad para encontrar pisos puede variar por el número de habitaciones: «Son más económicos los que tienen un número mayor de dormitorios», comenta Gonzalo Lijó, quien fue estudiante de Ciencias de la Educación Física y el Deporte.

En conclusión, los pisos varían en cuanto a calidad y los precios son relativamente económicos en comparación con otras ciudades universitarias. No suelen ser pisos muy antiguos, algo que abunda en el clima estudiantil, sino pisos de más calidad. Los alumnos están cómodos en la ciudad e inmobiliarias y caseros también. El beneficio es mutuo.

«La vida en Pontevedra es mucho más barata que en otras ciudades»

Ana Amaro Rey (Mondariz, 1995) es una estudiante de Bellas Artes en Pontevedra. Admite no haber tenido dificultades para encontrar un piso en condiciones. «Vimos alguno con humedades o muy pequeños. Encontramos uno céntrico y no nos hemos cambiado». Cuenta que lo consiguieron a través de una inmobiliaria y que es una ciudad «mucho más barata que otras».