La policía local guarda 26 sobres con dinero encontrado que nadie reclama

María Hermida
maría hermida PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Ramón Leiro

A los dos años de la custodia, los agentes se los devuelven a quienes los encontraron

09 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Ocurre más veces de las que podría pensarse. No son uno ni dos los pontevedreses que, como hizo la joven Maite esta semana, devuelven dinero que se toparon en la calle o en algún otro lugar. El año pasado la Policía Local recibió un total de 85 objetos -sobres, bolsitas o carteras- que contenían distintas cantidades de dinero encontradas. Si llamativa es la cifra, más lo es el hecho de que solamente 59 de esos importes fueron reclamados. De hecho, un total de 26 todavía continúan a la espera de que su legítimo propietario vaya a recogerlos. Antes de entregárselos, lógicamente, se comprueba que realmente sean suyos. Tiene que aportar hasta el último detalle sobre la desaparición, la cantidad y aspecto del recipiente en el que iban metidos los billetes en cuestión.

Los 26 sobres con dinero que de momento continúan sin dueño los custodia la Policía Local de Pontevedra en una caja fuerte. ¿Hay cantidades importantes? Hay alguna que supera los 200 euros. Pero ya se entregaron importes perdidos y encontrados por alguien que superaban los mil euros, tal y como recordaba ayer el portavoz de la policía municipal pontevedresa. Manuel Omil indicaba también que, tal y como estipula la normativa, si a los dos años de la custodia policial no aparece el dueño del dinero, este se le entrega a la persona que lo encontró.

Y no solo hay dinero en la caja fuerte policial. Ahí se custodian también algunas joyas encontradas que sus legítimos propietarios tampoco reclamaron aún. Por no hablar de los más variopintos objetos que guardan en la sección de objetos perdidos. No hace mucho tiempo se custodiaba ahí una silla de ruedas que alguien extravió y es común que a cada paso también acaben ahí sillitas de paseo de bebés. Los padres, normalmente, vuelven a por ellas a las pocas horas.

Omil también insistía en que cuando se encuentra un objeto o una cantidad de dinero es obligatorio llevarlo a la policía. En el código civil indica que hay que entregárselo al alcalde, pero es porque la normativa es antigua y en realidad quienes lo custodian son los agentes locales.

Quien topa una cantidad o un objeto de valor puede reclamar a su dueño una gratificación del 10 %

El jueves, cuando José Losada se citó con la chica que encontró los 700 euros que él había perdido en el paseo de Colón, él decidió gratificarla con 50 euros en compensación por el gesto generoso de ella. En realidad, esta iniciativa de José está regulada por ley. Lo indica el artículo 616 del Código Civil, que habla de qué ocurre con quienes topan una cantidad de dinero o un objeto de valor. Dice así: «Si se presentare a tiempo el propietario, estará obligado a abonar, a título de premio, al que hubiese hecho el hallazgo, la décima parte de la suma o del precio de la cosa encontrada. Cuando el valor del hallazgo excediese de 2.000 pesetas [la normativa, como queda claro con la referencia a las pesetas, es antigua pero sigue vigente] el premio se reducirá a la vigésima parte en cuanto al exceso».

En ese artículo del código civil se indica también que cuando se encuentra algo hay que devolverlo y, si el dueño no es conocido, hay que entregarlo «al alcalde».

«Esta noche pude dormir tranquilo», dice el pontevedrés que perdió y luego recuperó 700 euros

El pontevedrés José Losada era ayer un hombre nuevo. Tras llevarse un disgusto enorme al perder 700 euros en plena calle, poner carteles alertando del extravío y luego recuperarlos ?los encontró una chica que se los devolvió? pudo dormir a pierna suelta tras varias noches de insomnio y nervios. «Hoy la verdad es que ya veo la vida de otra manera, esta noche pude dormir tranquilo... esto es otra cosa», decía entre risas mientras no dejaba de recibir llamadas de medios de comunicación de toda España interesados por su caso.

José Losada perdió 700 euros. Para muchas personas quizás no sea una cantidad importante. Pero para él significan un mundo. «Es mi salario entero, todo lo que tengo para vivir, porque voy al día», repetía una y otra vez. Por eso se afligió tanto cuando el martes perdió la bolsita con el dinero justo antes de ingresarla en el cajero para pagar el alquiler y demás facturas. En las horas que pasaron hasta que recuperó el dinero hizo miles de cuentas mentales y no lograba casar los números. Estaba pensando en pedir auxilio a su madre o algún otro familiar. Pero no veía las cosas claras. «Lo iba a pasar mal e iba a tener que decirle a la casera que no le podía pagar», indicaba el hombre.

La historia tuvo final feliz gracias a Maite, una joven que iba por la calle con un amigo y se topó la bolsita con el sueldo de José Losada. Después, vio también los carteles alertando del extravío de dinero y llamó a José por teléfono para la devolución. El hombre no acababa de creerse su suerte. Le temblaba la voz y las manos cuando vio a Maite.