De luchar por ascender a tratar de sobrevivir un año después

C. Pereiro PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

emilio moldes

El Pontevedra deberá sacar a relucir su mejor cara en las próximas jornadas

27 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Aunque el tiempo es raudo y no se le conoce botón de pausa, la percepción del mismo es algo más personal. No hace mucho, apenas un año, el Pontevedra se encontraba luchando por obtener el cuarto billete hacia la Segunda División. Ahora, la pelea por la supervivencia es más que evidente y hace unas semanas se antojaba desesperada. Quedan tres jornadas para finalizar la temporada y el Pontevedra tiene la permanencia en la mano, pero el campeonato se convirtió, hace tiempo, en una cuesta arriba demasiado empinada y con demasiada tensión.

Justo en la antepenúltima jornada de hace doce meses, los granates se midieron fuera de casa al Boiro. A posteriori se convertiría en el último empate de la temporada. Luego llegó una victoria y un final con derrota. Fue suficiente, el Pontevedra logró su cuarto puesto y luchó contra el Real Murcia por el ascenso. Solo fueron dos partidos, pero la ilusión quedó sembrada, y hasta quiso germinar.

Quizás por ello haya dolido tanto a la afición una temporada como la presente. Pasar de saborear un playoff de ascenso a tratar de alejarte de su inverso al galope, temeroso el equipo de salir fuera de casa durante dos tercios de la competición. Por el camino se cayó un entrenador y llegó Luismi. Finalmente, parece que las piezas lograron encajar, aunque el esfuerzo fue gigantesco por todas las partes. Un inicio en penumbra, con hasta tres partidos sin puntuar, y que rompió la racha el empate contra el Toledo. La liga se presagiaba dura. Los cambios en la plantilla no convencieron y se acumularon las incertidumbres.

El Toledo perdió en casa

El conjunto toledano tenía un partido pendiente de disputar. Rival directo también por la salvación, cayó finalmente en su estadio contra el Real Madrid Castilla por la mínima. Esta derrota mantiene al Toledo en puestos de descenso a 7 puntos del Pontevedra y con solamente 9 por repartirse.

El Pontevedra sabe ya que con no perder en los tres partidos restantes podría respirar aliviado. Además, cuenta con la diferencia de goles a su favor con la mayoría de sus rivales (Coruxo, Valladolid B y Racing de Ferrol). Este factor, en el caso de la Gimnástica, se resolverá este domingo. Con el Guijuelo decidirá el gol average general.