En los últimos años, la ciudad de Pontevedra ha conseguido instaurar, también, un «modelo» de carnaval urbano que se ha convertido en un referente en toda Galicia
23 ene 2019 . Actualizado a las 20:47 h.Creo que no existe fiesta más transversal socialmente que el Carnaval. La participación y la expectación que generan el Entroido en ciudades como Pontevedra es inimitable. Su singularidad radica en la implicación de ciudadanos de todas las edades y condiciones a lo largo de los nueve días que viene a durar -salvo imprevistos o suspensiones por mal tiempo-. A diferencia de la Feira Franca que concentra miles de personas pero básicamente en la jornada del primer sábado de septiembre, el Carnaval mantiene ese nervio movilizador durante más días y en las diferentes facetas que propone: desfile principal, entroido infantil, certamen de murgas, noite pirata; mostra da parodia y entierro de Ravachol.
Además el Entroido es un excelente motor económico en fechas lánguidas para los diferentes sectores que se benefician del movimiento financiero que genera, del orden de 38 millones de euros en la provincia, según la Federación Provincial de Comercio.
Modelo de entroido
Pontevedra ha conseguido instaurar, también, un «modelo de entroido» que ha adquirido una personalidad propia a lo largo de las décadas transcurridas desde que un grupo de entusiastas tuvieron la ocurrencia en 1984 de recuperar el «carnaval en la calle». José Víctor González Pepe Shiva, los hermanos Garcia Louzao, Bibiana Araújo, Juan Gómez Cuerpo, Peregrino Vázquez y otros, que con el apoyo de Manolo Rodríguez Pousada y José Manuel Brea Vaamonde (que fueron los concejales de fiestas de aquellas corporaciones), vieron y creyeron que había un potencial en esa fiesta que salía de los salones de las sociedades recreativas donde se recluyó durante el franquismo, para reconquistar las calles.
Progresivamente, los sucesivos gobiernos municipales asumieron que el Entroido pontevedrés era un potente referente que había que mimar. Los gabinetes de la etapa Fernández Lores cuidaron que esa potencialidad no se menoscabase de modo que el Entroido se ha vigorizado. La decisión de hacer festivo local el Miércoles de Ceniza va en esa línea.
Una demostración palmaria de donde estamos la constituye que el carnaval urbano de Pontevedra sea citado este año en la Guía Repsol entre una selección de las mejores citas carnavalescas de España. Bajo el epígrafe El reinado del Loro Ravachol, la popular guía para viajeros nos refiere como la ciudad donde «pierden un poco la cabeza en carnaval: hacen revivir a un loro para luego quemarlo en lugar de la sardina de toda la vida, rodeado de viudas desconsoladas vestidas de época…».
Pontevedra, un plató de cine que brillará en los Premios Mestre Mateo
La semana nos deparó un alegrón para los pontevedreses en general y los cinéfilos en particular: dos cintas grabadas en esta ciudad han sido nominadas entre las finalistas para los premios Mestre Mateo, principal galardón del audiovisual gallego, que se fallarán el próximo 3 de marzo. Se trata de sendas operas primas. Por una parte, el documental Castelao: de chumbo a verba dirigido por Miguel López, basado en los años en que el destacado galleguista vivió en Pontevedra. Y de otra parte, el largometraje A estación violenta, dirigido por otra novel, Anxos Fazáns quien se basó en la novela de nuestro colega Manuel Jabois.
Actores y técnicos
El trabajo de Miguel López, por cuestión de metraje y minutado, solo puede concurrir a la sección de documentales donde peleará contra otras tres producciones. Por su parte, la película de Anxos Fazáns, respaldada por Matriuska Produccións, compite hasta por ocho estatuillas que incluyen desde mejor película hasta nominaciones actorales y por diferentes aspectos técnicos como fotografía, montaje, guion o sonido.
Ambas cintas enfatizan la calidad y condición de nuestra ciudad como un fabuloso plató de cine, cada vez más requerido por productoras nacionales tanto para películas como series de televisión.
De hecho junto a ambas cintas también han sido seleccionadas para la gala de los Mestre Mateo otras dos producciones realizadas en nuestra ciudad. Se trata de las «webseries» Generación Wifi, de Lucía Castro; y Peter Brandon, un proyecto que encarnó el cómico Pedro Brandariz.
Los cuatro trabajos audiovisuales refrendan la idoneidad de nuestra urbe para las producciones audiovisuales.
Trabajo municipal
Alcanzar esa condición no ha sido gratuito ni casual; sino el producto de un trabajo encadenado desde 2013, año en el que se creó la Pontevedra Film Comission, dependiente del Concello, para la gestión de localizaciones, rodajes y asistencia de todo tipo para producciones audiovisuales.
La iniciativa de la concejala Carlota Román fue asumida posteriormente por Anabel Gulías de modo que el posicionamiento de Pontevedra como plató en el audiovisual nacional no se ha menoscabado por cambios políticos en la corporación. Esa continuidad ha permitido que durante 2017 nuestra ciudad acogiera una parte del rodaje de la última película de Dani de la Torre y Luis Tosar, hasta sendas series de televisión como Fariña y Vivir sin Permiso, de Atresmedia y Mediaset respectivamente.
Las perspectivas para 2018 son ilusionantes y se materializarán en nuevos rodajes.