El Concello abre los contactos con las Clarisas sobre la huerta del convento
PONTEVEDRA CIUDAD
La orden religiosa no decidirá el futuro del cenobio hasta mediados de enero
12 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Las Clarisas ya conocen de primera mano la intención del Concello de Pontevedra para llegar a un acuerdo que permita abrir la huerta del convento a la ciudad. El alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores (BNG), y el concejal de Patrimonio, Vicente García Legísima, se reunieron el viernes en Santiago con la abadesa de la orden en Santiago. Fue el primer contacto tras el cierre del cenobio de Santa Clara, que tuvo lugar el pasado septiembre.
De ese encuentro no salió ningún acuerdo, ya que todavía hay una cuestión pendiente: la decisión definitiva de abandonar o no el uso del convento. La falta de vocaciones y de monjas de clausura es el principal escollo. En Galicia la orden tiene, además de Santiago, conventos en Ribadeo y Allariz. «Ata que isto estea decidido non se pode negociar nada», subrayó el regidor. Al parecer, esa determinación se adoptará a mediados de enero, cuando está previsto que visite Santiago la presidenta de las Clarisas de España, sor María del Rosario Sánchez Muñoz.
La postura del gobierno local es incorporar parte de los 12.500 metros cuadrados que ocupa el convento en el centro de la ciudad como espacio público, además de contribuir a conservar el patrimonio histórico, arquitectónico y natural existente. De entrada y de haber esa opción, el Concello no se plantea la compra del edificio del siglo XIII. «En principio non barallamos a compra, se tiveramos necesidade dun edificio, pero os tiros non van por aí. Falamos de conservar o patrimonio e de darlle un uso público a parte do xardín. Eles teñen dificultades para mantelo aínda que lles axuda unha persoa», expuso el alcalde.
Desde el gobierno local aludieron a la «boa sintonía» en esos primeros contactos, aunque admitieron que no se avanzó mucho. «Si hai coincidencia con nós en que hai que manter ese patrimonio», remachó Lores. Por su parte, sor Consuelo, la abadesa de las Clarisas de Santiago, no quiso valorar ayer la entrevista al ser «una cuestión privada».