Más de 34.000 kilómetros a pedales para defender el medio ambiente

Nieves D. Amil
nieves d. amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

emilio moldes

Hutchison empezó en el 2006 una vuelta al mundo, que ayer le trajo a Pontevedra

29 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Sus piernas recorrieron más de 34.000 kilómetros. Y sigue sumando. No tiene pensado parar, al menos se ve doce años más caminando para defender el cuidado del medio ambiente. A su espalda suma ya una buena experiencia que arrancó en el año 2006 muy lejos de su Manchester natal. Martin Hutchinson, con 56 años, recuerda como hace once

cogió un avión a Cancún y echó a andar. El primer día caminó 22 kilómetros y descubrió algo sorprendente. Le gustaba. El siguiente día volvió a hacer lo mismo y como Forrest Gump, no pudo parar. «Durante nueve años caminé todos los días», explica este exbombero, que ayer llegó a Pontevedra proviniente de Portugal. Su única compañía es su perro Starsky, que lo encontró abandonado en el Algarbe hace 8 meses, una especie de bicicleta en la que se desplaza semitumbado y su inseparable móvil. En cada parada clava su objetivo para mostrar la basura que el ser humano lanza al planeta. Ayer todavía mostraba sorprendido unas imágenes que grabó en Perú hace años en las que el servicio municipal de recogida de basura vertía cuatro veces al día el camión en uno de sus ríos. Aquí, asegura, estamos lejos de eso. «Tenemos una actitud peligrosa ante el mundo, pero desde Tui hasta aquí está todo bastante limpio», explica Hutchinson, que ayer paró a tomar un café en el parque de bomberos de Pontevedra.

Su ruta continuará hoy por la costa hasta llegar dentro de unos días a A Coruña. Es la primera vez que recala en Galicia, pero su experiencia se ha ido forjando por Sudamérica y por Europa. Arrancó en Inglaterra, pasó por Italia, Francia, España, Portugal y ahora llega a Galicia. Han hecho falta 38 pares de zapatos para poder llevar a cabo una andadura, que le ha permitido conocer 21 países.

Nada de volver a Manchester

De volver a Manchester no quiere ni oír hablar. «Manchester no gusta», sentencia en un español difícil de entender este bombero retirado por problemas de corazón. «Antes era perfecto, ahora es muy complicado», explica Hutchinson, que pertenece a una familia en la que la aventura va en su ADN. Una hermana vive en Australia, otra en Francia, un sobrino, en Canadá y otro en Sudáfrica. «Es profesor de Matemáticas y ahora se va tres años a dar la vuelta al mundo en un velero que construyó», recuerda.

Su labor no es solo la aventura, además tiene un canal en Youtube donde cuelga todos los vídeos que va grabando en las playas, y que en más de una ocasión le ha traído problemas. «En Argentina querían matarme, tuvieron que sacarme por la noche del pueblo para que no me pasase nada», cuenta Martin, que advierte del riesgo de no cuidar el planeta. «Solo en un kilómetro de trayecto en Portugal recogí 431 botellas de plástico y 70 yogures. Nadie se puede imaginar cuantos bastoncillos de los oídos aparecen en la arena. Urge un cambio de actitud, solo pensamos en nosotros», indica.

En esta travesía ha parado ya en más de 600 universidades y escuelas. Sabe que en España es difícil ir a colegios para intentar concienciar a los niños, pero su lucha no cesará, espera seguir pedaleando hasta el 2029.

En los once años que lleva caminando ha gastado 38 pares

de zapatos

Cuelga sus experiencias en Youtube para concienciar

a la sociedad