El Teucro retoma la liga ante un clásico en horas bajas

PONTEVEDRA CIUDAD

RAMON LEIRO

Quique Domínguez destaca el gran potencial del Ademar pese a sus dos últimas derrotas

01 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Después de diez días de parón competitivo, el Condes de Albarei Teucro retoma hoy la liga Asobal en la pista de todo un clásico del balonmano nacional como el Ademar León (20.45 horas). Un encuentro, adelantado a este miércoles debido al compromiso europeo del equipo castellano, que Quique Domínguez no duda en calificar como de «dificultad máxima», ya que para el técnico azul, «siempre lo es cuando juegas fuera de casa, pero en este caso nos enfrentamos a un equipo muy potente».

El bloque leonés, actual subcampeón de liga, llega al duelo después de encadenar dos derrotas, algo que para Domínguez supondrá que el Teucro se encuentre a un equipo «herido». Pero más allá de cómo puedan afectar los resultados previos al rival, el entrenador pontevedrés hace hincapié en que se trata de un conjunto «muy completo». Y a la hora de definir sus características, pone el acento en el alto ritmo que imprime a su juego, centrándose en defender y correr, por lo que avanza la receta que debe utilizar el Teucro si aspira a sorprender al Ademar. «Debemos tener buenas situaciones de lanzamiento, tratar de estar acertados y reducir al máximo las pérdidas de balón, porque al contraataque tiene verdaderos especialistas», apunta Domínguez.

Respecto a cómo llega el Teucro al partido, el técnico azul afirma que el parón de la competición «nos ha sentado bien para desconectar, ya que veníamos de unas semanas de mucha carga y mucho viaje». Y ya con las pilas cargadas, asegura que sus hombres están con «ganas de retomar la competición, hacer un buen partido y plantar cara».

El descanso, en cambio, no ha servido para recuperar a jugadores como Edu Moledo, que sigue de baja por una rotura de fibras, u Óscar Silva, que continúa con problemas en el hombro y está a la espera de que las pruebas médicas a las que se iba someter ayer aclaren el alcance real de su lesión. Junto a ambos, también continúa con su proceso de recuperación Johnny Medina, al que el técnico confía tener a sus órdenes el próximo mes. Y la noticia negativa de la semana ha sido el accidente doméstico que sufrió el lunes el italiano Colasuonno, que le provocó un aparatoso corte en la mano y todo apunta a que le impedirá, cuando menos, ser hoy de la partida.

En cualquier caso, Quique Domínguez evita poner el foco en las bajas y afirma que el equipo viaja a León con una «gran motivación», y que esta no se ha resentido con los últimos resultados adversos. No en vano, el técnico explica que una de las ideas que intenta inculcar a sus hombres es que «en esta categoría hay que estar preparados para perder», añadiendo que «la liga va a ser larga y dura».

Por su parte, coincidiendo con el discurso de su entrenador, el luso Bruno de Castro se muestra muy motivado por enfrentarse a un rival del que, afirma, «sabemos la calidad que tienen». Aunque, a la vez, admite que esta fortaleza del bloque leonés le hace afrontar el duelo con muchas ganas ya que añade que «ante equipos tan grandes siempre quieres jugar bien y demostrar».