La autora que reivindica un cine más accesible

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

RAMON LEIRO

Julia Castro y su equipo estrenan en Pontevedra «Generación Wifi», una webserie con crítica y humor

13 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los orígenes de la webserie Generación Wifi, que se estrena en Pontevedra el próximo 18 de octubre, están en un corto anterior de su directora y guionista, Julia Castro (Pontevedra, 1987), y en el «examen de conciencia» que ella misma hizo sobre su relación con las nuevas tecnologías. «Escribí un corto, Conection, sobre la adicción al WhatsApp. Es un tema que siempre me interesó y yo misma primero hice un examen de conciencia. No quiero estar enganchada y que eso condicione mi vida», explica Julia.

Esta periodista especializada en productos multimedia compagina su afición a los guiones y la dirección con su trabajo como responsable de prensa de Aspace, la federación de asociaciones de personas con parálisis cerebral. «Llevo desde este año. Fue por una entrevista de trabajo, buscaban a un periodista que pudiera grabar vídeos y editar y me cogieron. La verdad es que estoy aprendiendo mucho», comenta. Julia cree que hay un gran desconocimiento sobre los proyectos que hacen estas asociaciones. «Hacen muchísimas cosas y su lucha y su espíritu de superación, tanto de ellos como de sus familiares, es increíble». Ella misma grabó un documental con Javier Fernández, un chico con parálisis cerebral de Vigo que tenía un sueño: hacer parapente. Es Vuela alto, que quedó finalista en un festival de Madrid.

Julia está inmersa ahora en los preparativos del estreno de Generación Wifi. Se trata de una webserie cuyo guion empezó a escribir en mayo del 2016 y que finalmente se grabó en enero del 2017. «Íbamos a grabar en octubre, pero lo tuvimos que retrasar y en enero nos coincidió con una ciclogénesis. Imagínate... Al final no pudimos rodar en A Barosa y nos dejaron el Mercado». ¿Y qué cuenta? «Digamos que se articula en torno a tres mandamientos actuales que no son religiosos. Ahora ya no se va a misa, ahora se coge el móvil y la gente se cree lo que te cuenta el móvil», relata. Inicialmente, la webserie iba a constar de diez capítulos, pero hubo que reducirlos a tres por un motivo de costes. «Preferimos tres bien hechos, a cinco mal», aclara Julia.

La crítica, el humor y el surrealismo se esconden en los títulos de los capítulos: Amarás a tu cargador sobre todas las cosas; No tomarás el selfie en vano; y Santificarás el medio digital. La directora y guionista de Generación Wifi se rodeó de un equipo de gente joven y subraya que nadie cobró por el trabajo. ¿A cuánto se fue el presupuesto de la webserie?, se le pregunta. Y la respuesta puede chocar. «No lo sé, lo he intentado, pero no puedo decirte una cifra. De verdad que me gustaría saberlo, pero mucha gente nos cedió material, otros nos dejaron grabar en un hotel y nadie del equipo cobró, ni los actores ni los técnicos».

Personas con alguna discapacidad juegan un papel destacado en cada capítulo. En Amarás a tu cargador sobre todas las cosas, Valeria, la protagonista, pierde su teléfono. Un vecino suyo sordo pondrá un punto de inflexión en la trama. África, una amiga ciega de Valeria, arrojará algo de luz a su exagerada dependencia de las autofotos. Es en No tomarás el selfie en vano. En el tercer y último capítulo, Santificarás el medio digital, el verdadero maestro de la protagonista será Pablo, un compañero de trabajo con síndrome de Down.

«Digamos que ellos van a ser los que le van a abrir los ojos. En el primer capítulo veo humor y surrealismo, el segundo diría que casi roza el drama, y en el tercero predomina el humor», afirma Julia. La autora solo tiene palabras de agradecimiento para el equipo y todas las personas, asociaciones y entidades que colaboraron. «Este es un trabajo en equipo, yo soy una más». De momento el resultado de Generación Wifi lo han visto pocas personas. «Solo una parte del equipo».

¿Y cómo es la relación de Julia con las nuevas tecnologías y las redes sociales? ¿Es ella una adicta? «Hay que diferenciar lo que es trabajo de la vida personal. No cuelgo fotos mías, no me hago selfis, y en las que aparezco o son de grupo o están relacionadas con el trabajo. Cuando salgo del trabajo, intento desconectar». Muchas veces lo consigue.