Pontevedra se rinde al baile latino

La Voz

PONTEVEDRA CIUDAD

NOEMI PARGA

Los pontevedreses tendrán mañana la última oportunidad de aprender a bailar gracias a la iniciativa impulsada por los comerciantes

30 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras el éxito alcanzado el pasado martes 22 de agosto, el casco histórico de Pontevedra volvió a convertirse ayer a partir de las 20.30 horas en una improvisada pista de baile gracias a Baila na zona monumental. En esta ocasión la céntrica plaza de Méndez Núñez fue el lugar elegido para la celebración de esta clase magistral a cargo de dos profesores de lujo, la pareja de bailarines formada por Patricia Martínez y Adrián Esperón.

La iniciativa, impulsada por el Centro Comercial Urbano Zona Monumental, «surgió tanto para visualizar el trabajo de esta pareja como para atraer gente y dinamizar la zona», tal y como aseguran desde la asociación.

Se trata de una actividad totalmente gratuita «pensada tanto para adultos como para niños de todas las edades y niveles», comenta Adrián. Partiendo de una base animada, hacen llegar su pasión a aquellos que los rodean esperando siempre «que participen todos, que sea una forma de reunir a familias y amigos», añade.

Así, los que se acercaron ayer a la plaza de Méndez Núñez pudieron iniciarse en el mundo del baile al ritmo de bachata, salsa, chachachá o «rumba más romanticona», tal y como explica el bailarín. Temas de artistas como Romeo Santos, Prince Royce o Shakira formaron parte del repertorio musical que hizo mover las caderas a los pontevedreses y visitantes que se animaron a participar, ya que desde la organización recuerdan que no se trata de una exhibición, sino de una actividad «enfocada a aprender».

Junto a Patricia y Adrián, actuales campeones de España -un título que consiguieron en catorce ocasiones- estuvieron presentes también otras parejas que forman parte del Club Baila-Mos.

Último baile

Tras dos jornadas de bailes al aire libre, mañana la plaza de A Verdura acogerá la última cita con los ritmos latinos. Así, a partir de las 20.30 horas este espacio se convertirá en una nueva pista de baile efímera para todos aquellos que se atrevan a mover las caderas.