Familiares del editor, periodista y escritor recibieron el título de hijo predilecto del Concello de Pontevedra en reconocimiento y gratitud de la ciudad por su obra
02 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Trece meses después de su fallecimiento en la capital de España, Sabino Torres Ferrer (Pontevedra, 1924-Madrid, 2016) recibió ayer en su ciudad el título de hijo predilecto del Concello de Pontevedra. Fue en el transcurso de un acto que tuvo lugar en el Café Moderno y al que asistieron varios familiares del editor, periodista y escritor, entre ellos su hija María, su hermana Carmen y su sobrino Gerardo Lorenzo.
La música del Dúo Fírveda, formado por Marina Hermida al violín y Nerea Rodríguez al acordeón, y una imagen de Sabino Torres proyectada en una pantalla de televisión sirvieron para envolver de emotividad el acto. El concejal Luís Bará fue el encargado de presentar la entrega del título de hijo predilecto al editor y escritor como «recoñecemento e gratitude da cidade de Pontevedra pola súa obra». Echando mano de unas palabras de Víctor Freixanes definió a Sabino Torres, «como un señor elegante», elegante «nas formas e nos contidos, nas ideas e na maneira de expoñelas, sen imposicións».
Gerardo Lorenzo Torres habló en nombre de la familia. Agradeció el acuerdo del pleno del Concello, adoptado a iniciativa del grupo Ciudadanos, y quiso compartirlo con todas aquellas personas que formaron parte de Gráficas Torres. Empleando el gallego y el castellano en su discurso, desveló que su tío sentía especial debilidad por el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, y también por Luís Bará. «Nos días no hospital falabamos moito de Pontevedra e do que facía Bará», dijo Lorenzo. Recordó la pérdida de Carme Chacón, amiga de la familia, y la conexión que tuvo Sabino con los nuevos periodistas de la ciudad. «Nuestras vidas no se entienden sin la figura de Sabino. Para mí es un modelo a imitar», destacó. Hizo hincapié en su capacidad para soñar y para sobreponerse a las dificultades y al dolor por varias pérdidas familiares. «Me decía ‘‘es importante que tengas capacidad de soñar, sin ella no sé que hubiera sido de mí’’», apuntó Gerardo, que dijo sentir muy cerca a su tío, que allá donde esté estará «haciendo poesía y armando revuelo».
Por su parte, el alcalde recordó a Sabino como un «home bo» e «íntegro» que dejó tras de sí «un ronsel fecundo de feitos, ideas, sentimentos e emocións». Lores recordó su vitalidad y que con casi 80 años ideó una revista para para contar los cambios de la ciudad. Su amplia y rica obra, afirmó el regidor, constituye un valioso legado que «temos a obriga de coidar, conservar e transmitir». La placa y el pergamino que sus familiares recibieron ayer es un primer paso en esa dirección.