La desaparición de un pontevedrés lleva al banquillo a varios narcos

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Piden 10 años por el rapto de Villaverde Amil, del que no se tiene noticia desde el 2010

28 abr 2017 . Actualizado a las 07:55 h.

La investigación de la desaparición hace siete años del pontevedrés José Bernardo Villaverde Amil, a quien se vincula con el narcotraficante también desaparecido José Antonio Pouso Rivas, Pelopincho, acaba de dar un giro de 180 grados. La Fiscalía de Pontevedra sentará en el banquillo de los acusados de la sección cuarta de la Audiencia de Pontevedra a cuatro personas a las que imputa un delito de detención ilegal agravado por el hecho de no haber dado cuenta del paradero de Villaverde Amil en todo este tiempo, cargo por el que se solicita una pena de diez años de prisión.

Hasta ahora lo único que se sabía a ciencia cierta es que la compañera sentimental del pontevedrés denunció que, sobre las 12 del mediodía del 19 de noviembre del 2010, dos individuos se presentaron en su domicilio de Monte Porreiro buscando al padre de su hijo. Los tres, junto con Pelopincho, se subieron al coche de José Bernardo, vehículo que apareció posteriormente calcinado en Brión (A Coruña).

Dos horas después de haber salido de casa, este último se puso en contacto telefónico con su mujer manteniendo una breve conversación, en el transcurso de la cual le comunicó que «llegará por la tarde». Fue la última vez que se tuvo noticias del pontevedrés y de Pelopincho, a quien el fiscal ni alude en su escrito.

En todo caso, considera que existen pruebas más que suficientes para vincular a Manuel Sineiro Fernández, Machucho; Fernando Suárez Suárez, El Pirata; Juan Manuel Fabeiro Torres; y un cuarto individuo en esta desaparición. De hecho, alude a que, veinticuatro horas antes de producirse este hecho, los cuatro se reunieron en las proximidades de un hotel de Santiago de Compostela para ultimar detalles y realizar los preparativos necesarios para llevar a cabo el rapto de Villaverde Amil.

De este modo, relata que, aquel 19 de noviembre, se desplazaron hasta su domicilio coincidiendo con este en el momento en el que regresaba a casa acompañado de su mujer. En el momento en el que se disponían a guardar el coche en el garaje, Sineiro Fernández se aproximó al pontevedrés y ambos mantuvieron una breve conversación.

En este sentido, el fiscal resalta que el acusado «era una persona conocida [por Villaverde Amil] y con la que mantenía trato», de tal modo que, «confiado en tal vínculo y sin conocer sus verdaderas intenciones», el pontevedrés no habría dudado en compartir coche. El turismo abandonó este punto del barrio de Monte Porreiro «seguido de forma inmediata por otros dos [automóviles], en los que viajaban varios hombres», entre ellos los otros tres encausados.

Caso archivado

Se da la circunstancia de que Manuel Sineiro, Fernando Suárez y Juan Manuel Fabeiro Torres ya fueron arrestados a principios de marzo del 2012 en el marco de una investigación que trataba de esclarecer qué había ocurrido con Pelopincho. Sin embargo, y pese a que fueron arrestados, las pesquisas no avanzaron al cabo de unos meses y el caso tuvo que ser archivado.