Las cifras del comercio on line no paran de aumentar, estamos ante un nuevo mundo por descubrir, ni siquiera estamos en los principios de cómo va a ser el futuro. Este tipo de comercio no deja de crecer debido a que los hábitos de compra de los consumidores están cambiando, cada vez existe un uso mayor de las nuevas tecnologías y una mayor confianza por parte del consumidor a la hora de realizar sus compras en la Red. Dentro del comercio digital entre los sectores más potentes están los relacionados con el turismo, textil y tecnología. Aunque el aumento es generalizado, por ello hay oportunidad para las microempresas para vender on line, el problema radica en encontrar un nicho de mercado rentable.
Las pequeñas empresas se especializan para ser competitivas en el mundo digital, como por ejemplo una empresa de éxito relacionada con el sector de los disfraces en Ponteareas u otra relacionada con sombreros y tocados, aquí en Pontevedra. Deben de hacerlo, porque el futuro está en la especialización de la pequeña empresa. No es fácil competir con una multinacional. A veces las pequeñas empresas se unen a plataformas de venta tales como Amazon o AliBabá pese a su coste -pagan un canon-, ya que les es rentable debido a las ventajas que proporciona contar con el apoyo de una plataforma mundial. No nos podemos quedar rezagados, tenemos que ser capaces de competir para que el pequeño comercio tenga la oportunidad de subsistir en un futuro próximo.