Los impagos al Concello superaron los cinco millones el año pasado

Serxio Barral Álvarez
Serxio barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Ramón leiro

IBI, agua y «viñeta» siguen siendo los conceptos con mayor número de morosos

12 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Durante el año 2016, el servicio de recaudación ejecutiva del Concello de Pontevedra tramitó expedientes por valor de algo más de cinco millones de euros (concretamente 5.005.319 euros), correspondientes a impagos generados en el mismo ejercicio. Tres cuartas partes de esa morosidad la concentran tres conceptos: el Impuesto de Bienes Inmuebles (con más de 17.000 recibos por valor de 2,1 millones cargados a ejecutiva), el recibo del agua y saneamiento (casi doce mil devoluciones por valor 810.000 euros), y el impuesto de vehículos o «viñeta» (más de diez mil impagados por 871.000 euros).

Esos cinco millones que pasaron a la vía ejecutiva -que se abre cuando se cumplen los plazos de pago voluntario- suponen aproximadamente un 11 % de la recaudación prevista por el Concello en impuestos directos (23,3 millones de euros) y tasas, precios públicos y otros ingresos (19,2 millones).

De todas formas, el hecho de que se devolvieran más de 30.000 recibos por valor de cinco millones no quiere decir que el Concello deje de ingresar esa cantidad. Lo hace incluso con intereses de demora. La empresa que se encarga de la vía ejecutiva, Recyges, logró recaudar en el 2016 algo más de 3,6 millones de euros. La mayor parte (1,5 millones), de recibos que habían sido devueltos durante el ejercicio 2015, mientras que apenas unos de 850.000 euros correspondían al año pasado, ya que por los plazos legales y los trámites que se siguen la posibilidad de cobrar impagos dentro del mismo año es bastante reducida. Previsiblemente, durante este año se cobrarán mayoritariamente recibos que forman parte de esos más de 30.000 pendientes del 2016.

Como curiosidad, hay que señalar que el año pasado se llegó a cobrar un recibo que estaba pendiente desde hace veinte años. Se trata de un cargo de 1997 por valor de 34,08 euros, que con el correspondiente recargo (6,82 euros) y los intereses de demora (36,41) acabó convirtiéndose en el doble, 77,31 euros.

Más de 27,5 millones pendientes

Con todo, la morosidad que padece el Concello de Pontevedra, como cualquier otra Administración, alcanza una cota bastante importante, ya que al cierre del pasado ejercicio seguía habiendo cobros pendientes por valor de más de 27,5 millones de euros. Dinero más que suficiente para sufragar unos cuantos proyectos municipales.

Aun así, los cinco millones cargados en el 2016 suponen un dato relativamente positivo, ya que hasta hace bien poco la cifra de impagos llegó a superar los siete millones de euros. Fue así en el 2009, 2011 y 2012; en el 2010 y el 2013 los cargos a ejecutiva superaron los seis millones; la cifra comenzó a descender en el 2014 (5,9 millones), y sobre todo en el 2015, cuando los impagos se quedaron en 4,1 millones de euros.

Las cifras siguen lejos de los 3,9 millones que se cargaron a la recaudación ejecutiva en el 2007, cuando empezó la crisis.

En el 2016 se tramitaron más de treinta mil avisos de embargo de cuentas

La tramitación que se sigue para cobrar a los morosos comienza con la notificación a través del correo ordinario del cargo pendiente. Estos avisos «de apremio» se envían directamente al domicilio del deudor en cuanto vence el plazo para el cobro del recibo, impuesto o tasa en cuestión. El año pasado se tramitaron desde el Concello nada menos que 29.273 avisos de apremio, aunque muchos de ellas no llegan a sus destinatarios.

Desde mediados del 2015, las notificaciones no entregadas se publican en el Boletín Oficial del Estado. El Concello de Pontevedra remite listados de morosos a este boletín mes a mes.

Cuando el proceso de notificaciones no da resultado, se inician las «actuaciones ejecutivas». La Administración local tiene capacidad para iniciar acciones de embargo de cuentas bancarias, de vehículos, de inmuebles o de devoluciones tributarias que correspondan del moroso.

Durante el año pasado se remitieron 30.129 mandamientos de embargo de cuentas y se acabó embargando unas cinco mil, obteniendo por esta vía 675.000 euros. Además, se completaron 236 expedientes de embargo de sueldos; y más de 1.200 particulares vieron cómo se les retenían devoluciones del IRPF por deudas con el Concello.

Además, se notificaron más de 1.500 diligencias de embargo de vehículos que se saldaron con 54 órdenes de captura y una veintena de precintos. En seis de estos casos, el proceso culminó en subasta de los vehículos, aunque cuatro siguen en manos del Concello al quedar desiertas las pujas.