La Xunta achaca la filtración de ríos y agua de mar al saneamiento local

Lars Christian Casares Berg
ch. casares PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Los problemas afectan a las redes de Pontevedra, Sanxenxo, Meaño y Cambados

06 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Depurar agua que no se debía depurar. En ello se van recursos públicos a diario. Tal y como alertaba La Voz ayer, cuatro ríos y toneladas de pluviales e incluso agua del mar se cuela en las redes de saneamiento municipales de la provincia, mezclándose con el caudal de aguas fecales que acaban en las estaciones depuradoras. Las infiltraciones fluviales afectan al menos a los ríos Lameira, Loira, Gafos y Gallo, cuyas aguas acaban saturando en ocasiones las depuradoras. También en Dena se producen filtraciones a la red de saneamiento, aunque en este caso directamente de agua procedente del mar.

Es difícil cuantificar el coste económico del problema. Como lo es también la responsabilidad de la disfunción de las redes de saneamiento de buena parte de la provincia de Pontevedra. Los ayuntamientos reclaman una mayor implicación de la Xunta de Galicia, como en el caso de Pontevedra, que buscó la colaboración de la Administración autonómica en el saneamiento del río Gafos. Este afluente del río Lérez, que entronca con este ya en su desembocadura en la ría de Pontevedra, tiene una red de saneamiento paralela al cauce, que cada vez que se producen crecidas se ve invadida por aguas del propio río.

Lo mismo ocurre en otras zonas de la provincia, donde se producen filtraciones a la red que acaban indefectiblemente transportando aguas en principio limpias hasta las depuradoras, estas sí, competencia autonómica.

Y es aquí donde se produce la discrepancia. Según explicaron desde la Consellería de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia, «dende a rede de saneamento de competencia municipal, chega a EDAR (estaciones de depuración de aguas residuales) excesivos caudais orixinados por problemas de infiltración, conexión de pluviais ou entradas de augas de mar».

Sin embargo, desde la Xunta de Galicia explican que «todos estes problemas foron estudados minuciosamente nos plans de saneamento local que Augas de Galicia elaborou e puxo a disposición dos concellos». Y cita expresamente a los de Sanxenxo, Meaño y Cambados. En cuanto al río Gafos, una obra que Concello de Pontevedra y Xunta de Galicia habían dado los pasos pertinentes para acometer en conjunto, al final, tras desligarse de la obra el departamento autonómico, será Pontevedra en colaboración con la Diputación quienes la asuman. En un principio se barajó un sistema de depuración basado en balsas, pero las continuas crecidas del río Gafos lo harían inoperativo. Ahora se diseña cómo afrontar el reto.

Más difícil parece el caso de las filtraciones de agua de mar a la red municipal que va a la EDAR de Dena, en Meaño. Según un informe de Aguas de Galicia, se depura hasta agua de mar que se filtra en los colectores. Augas de Galicia destinó más de setecientos mil euros a la explotación de la depuradora y otros 330.000 al mantenimiento y mejoras. Un coste que las filtraciones de agua de mar lastran.

Así las cosas, Xunta y ayuntamientos tienen pendiente la resolución de estos problemas de filtración. En ocasiones, los concellos más pequeños carecen de capacidad económica para acometer las mejoras que la Xunta de Galicia achaca a sus competencias.

«Dende a rede de saneamento de competencia municipal chegan excesivos caudais por inflitración»