Invasores de «cinco minutos» en las plazas para conductores con movilidad reducida

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

L. Penide

Pedaladas lleva a cabo una iniciativa, con cierta dosis de autocrítica, para erradicar conductas que «son inaceptables»

19 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

«Volvo en cinco minutos». «É un momentiño». «Termino rápido y ya marcho»... Estas y otras expresiones similares son escuchadas cada día en Pontevedra y su comarca por conductores con diversidad funcional y sensorial cuando pretenden estacionar en las plazas reservadas para ellos y observan como están siendo empleadas por otros usuarios a modo de estacionamientos de carga y descarga, o de servicios.

Ante esta realidad, y en colaboración con Amizade, la asociación Pedaladas va a llevar a cabo una campaña de concienciación «para reivindicar que as prazas para persoas con mobilidade reducida só teñan un uso válido, o de garantir o dereito a unha mobilidade digna das persoas con diversidade física». Y será, según aseguran, una campaña con una fuerte dosis de autocrítica en el colectivo ciclista. No en vano, «tamén se constatou que se están a dar casos de bicicletas aparcadas que dificultan o acceso e saída das prazas».

Para Pedaladas, tanto unas conductas como otras, «son inaceptables», mas si cabe, en el caso de las bicicletas cuando hay en las proximidades lugares habilitados para su estacionamiento. «Non entendemos que estes ciclistas estean a limitar as posibilidades de uso por parte das persoas con diversidade funcional».

Es por ello que uno de los aspectos de esta iniciativa social está encaminado a concienciar a los usuarios de los vehículos de dos ruedas para que no bloqueen o entorpezcan el acceso a los espacios de estacionamiento restringido. Incluso, desde el colectivo pontevedrés van un paso más adelante y no descartan, llegado el caso, requerir la presencia de la grúa municipal para que retire aquellas bicicletas que dificulten el paso a unas persona que se ven obligadas, en estas situaciones, a «facer un sobreesforzo».

En cuanto a los vehículos que invadan estas zonas de estacionamiento, los representantes de la asociación ciclista pontevedresa tienen intención de ponerse en contacto con el Concello para que habilite, a través de la sede electrónica, un formulario para poder interponer denuncias voluntarias. De este modo, los damnificados podrían recurrir a medios telemáticos para dar cuenta de una infracción, toda vez que «lles custa un esforzo innecesario ir á Comisaría a presentar a denuncia».

Descenso de multas

Lo cierto es que, frente a las apreciaciones de algunos miembros de Pedaladas, los datos objetivos muestras que en Pontevedra se ha venido produciendo un paulatino descenso de estas infracciones, lo que se interpreta como un mayor grado de cumplimiento de la normativa que regula este tipo de estacionamientos restringidos. Se ha pasado de 399 denuncias en el 2011 a las 210 del pasado año, con la salvedad de que en el 70,5 % de los casos la multa lleva aparejada la retirada del vehículo por la grúa.