La Diputación inicia una nueva búsqueda de deudores y pone el foco en más de 4.600 morosos

Lars Christian Casares Berg
christian casares PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

Solo entre un 1 % y un 3 % de los recibos que gestiona la institución provincial no se logran cobrar

17 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Corren el riesgo de que sus cuentas acaben embargadas. La Diputación de Pontevedra ha puesto en su foco a más de 4.600 deudores a los que les reclama dinero que no han ingresado. Se trata, en su mayor parte, de los tributos que la institución provincial gestiona para buena parte de los ayuntamientos de la provincia que carecen de una maquinaria administrativa para hacer frente a la recaudación entre sus vecinos.

La Diputación ha tratado de dar con ellos, pero no lo ha logrado. Al entenderse que la falta de notificación no es imputable a la Diputación, directamente se inicia el proceso que acabará en embargo si los morosos no satisfacen antes el pago.

Solo entre el 1 % y el 3 % del importe final que recauda la Diputación de Pontevedra se acaba despistando entre recursos, faltas de notificaciones u otros métodos para evitar el pago. Porque la maquinaria administrativa nunca se para. En período voluntario, la institución provincial logra que se abonen entre el 85 % y el 90 % de los recibos que envía a los ciudadanos. Luego, en vía ejecutiva acaba cobrando la mayor parte, aunque sea recurriendo al embargo, como se anuncia en este caso. Con todo, cobrar en vía ejecutiva o mediante embargo es un mal negocio para la Administración. Aunque el deudor acaba pagando con recargo, mover la maquinaria administrativa es costoso. De hecho, la Diputación ya inició el pasado mes de febrero la búsqueda de más de dieciocho mil deudores de impuestos y tributos municipales.

El Oral, el organismo en el que tiene centralizado el cobro la Diputación de los tributos de 54 ayuntamientos de la provincia, se encarga en primera instancia en emitir los recibos. Y no son pocos. Están los casi cuatrocientos mil recibos catastrales, a los que hay que añadir los impuestos de circulación de vehículos e incluso las multas que se imponen en algunos municipios de la provincia de Pontevedra y que también gestiona la Diputación.

Por eso, pese a que la cifra de contribuyentes que ahora busca la institución provincial puede parecer elevada, no lo es en relación a la cantidad de recibos que pone anualmente al cobro la institución a través del Oral.