El Sella desemboca en Río

manu otero PONTEVEDRA / LA VOZ

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Álvaro Fiuza, hexacampeón del descenso, opta a los Juegos con Perucho

28 abr 2016 . Actualizado a las 13:08 h.

Tres veces campeón del mundo de maratón y seis veces consecutivas ganador del descenso internacional del río Sella, el palista pontevedrés Álvaro Fernández Fiuza da un giro de 180 grados a su carrera como piragüista para hacer realidad el sueño de todo deportista. Estar en unos Juegos Olímpicos. Para lograrlo contará con el apoyo de un amigo, compañero de profesión y medallista olímpico, Carlos Pérez Ríal, Perucho. Cuatro de los brazos más potentes del Lérez y Aldán, unen sus fuerzas para conseguir el billete al preolímpico que se celebra en mayo en Duisburgo.

«Como buenos gallegos nos liamos entre los dos, somos echados para delante, nos gustan los retos difíciles, y en una sobremesa salió esta opción y la cogimos con ganas», relata Fiuza el momento en que se embarcaron en esta aventura. Juntos forman una pareja explosiva, «mi punto fuerte quizá sea el ritmo y el de Perucho la explosividad», reconoce el deportista pontevedrés que ejerce su profesión de policía en la comisaría de Oviedo. «Trataremos de aprovechar los puntos fuertes de ambos, competiremos contra K2 muy rápidos y en la salida a ver si Perucho emplea el factor explosividad para ponernos al frente y a ver si con mi ritmo conseguimos realizar una regata disputada», explica Fiuza la estrategia para conseguir la plaza en el selectivo del K2-1000 que tendrá lugar en el embalse asturiano de Trasona el fin de semana del 8 de mayo.

El fuerte viento que suele soplar en el campo de regatas asturiano no asusta a esta insólita pareja. «Yo me crié en la ría de Pontevedra y Perucho en la de Aldán, así que de viento estamos más que servidos», reconoce entre risas el pontevedrés dejando entrever que las condiciones climáticas sí que pueden influir en el resultado.

La preparación del asalto a los Juegos del medallista de Cangas y del campeón mundial de Pontevedra comenzó en enero. «La decisión la tomamos después de las Navidades, primero hicimos unas pruebas para ver si merecía la pena hacer una apuesta tan ambiciosa y vimos que íbamos cómodos», declara el palista afincado en Asturias. Aunque no todo fue sencillo, «hubo momentos en que parecía que la preparación se quedaba estancada pero ahora que se acerca el selectivo hemos notado una mejoría bastante buena», confiesa Fiuza.

Tanto Perucho como Álvaro confían en sus posibilidades, pero son conscientes de la dificultad que entraña estar en Río. Primero deben ganar la carrera del selectivo ante rivales nacionales y después repetir triunfo en Alemania superando a la élite europea. «Los favoritos son los gallegos de Tui, están en un estado de forma muy bueno y si les ganas a ellos que fueron los primeros en quedarse fuera, sabemos que podremos hacer un buen preolímpico», reconoce el hexacampeón del descenso del Sella.

El sueño olímpico del pontevedrés supone la renuncia a otro objetivo, el mundial maratón que se celebra en Pontevedra, cuya preparación es incompatible con la del preolímpico.