Comienza el apuntalamiento del emblemático edificio de la calle César Boente que amenaza ruina
25 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Hasta un metro de escombro se amontona en el interior de las habitaciones de la planta baja del Pazo Mariño de Lobeira. Ayer, operarios de una empresa de demoliciones comenzaron el desescombro del emblemático edificio del casco antiguo de Pontevedra para proceder después a su apuntalamiento. En numerosas estancias la estructura completa de techos y tejados e incluso tabiques interiores se ha desplomado y se amontona en el suelo.
La semana pasada el Ayuntamiento emitió a través del servicio de Disciplina Urbanística una orden en la que se obligaba a consolidar la estructura mediante la retirada del escombro, que estaba afectando a la resistencia de los muros, y el posterior apuntalamiento del pazo, que data del siglo XV.
Fueron los propietarios quienes informaron del «grave riesgo de colapso», del histórico edificio, por lo que el Ayuntamiento actuó con celeridad para emitir un informe técnico sobre el estado ruinoso y permitir el apuntalamiento. El edificio había acelerado su deterioro en los últimos años, después de que los últimos bajos comerciales abandonasen su actividad. En el 2011, una serie de desprendimientos en el interior del edificio obligó a precintar y vallar el inmueble y a retirar parte de la cubierta, pero los desperfectos continuaron y finalmente se ha procedido a la orden de retirada de los escombros, que, como se podía apreciar ayer, alcanzaban el metro de altura.