La estrategia del Compostela en un San Lázaro encharcado noquea a los granates
07 feb 2016 . Actualizado a las 05:15 h.El Compos frenó la ascendente marcha del Pontevedra en el encharcado San Lázaro: 3-0. Lo hizo con un buen fútbol y apostando por la posesión en un escenario casi imposible para el juego combinativo. El defensa central Catú, con dos cabezazos dentro del área, y Manu Rodríguez, con un potente disparo cerca de la escuadra, arruinaron todos los planteamientos del once granate, que incluso pudo abandonar la capital gallega con un marcador más abultado, pero Guillem Martí falló casi a puerta vacía y Bicho erró un penalti en el último suspiro.
El equipo santiagués cambió la cara y es otro bien diferente al que se vio en la primera vuelta. El Pontevedra comprobó la nueva marcha que Fredi Álvarez le puso a un colectivo que hace menos de un mes estaba en el desguace. El cuadro de Luisito, sin embargo, no mostró en la capital gallega su verdadero potencial.
Ya desde el inicio del derbi, el Compos llevó el peso del partido y acarició con más criterio el balón. El once visitante nunca se sintió cómodo ante el empuje blanquiazul. Los pontevedreses intentaron presionar la salida del balón, pero el conjunto local nunca perdió el orden.
Fredi Álvarez sorprendió en el arranque al situar tres centrales y darle vía libre a sus laterales buscando la profundidad que casi nunca tuvo el Compos en este curso. Arriba, Guillem Martí fue una pesadilla para la zaga del Lérez, que no tuvo muchos recursos para frenar la fuerza con la que Jordan perforó insistentemente la retaguardia granate.
Luisito no paró de dar órdenes y de corregir los movimientos defensivos de su equipo. Gritó una y otra vez para que sus futbolistas se sacudiesen con mayor contundencia el dominio local. Al Pontevedra le costó muchísimo trabajo hacerse con el balón y la gran mayoría de sus posesiones fueron demasiado cortas.
Buenas ocasiones
Jordan, el mejor blanquiazul durante el acto inicial, fue el primero en incomodar al entrenador visitante. En la primera acción no controló bien dentro del área y en la segunda jugada chutó por encima del travesaño. El Compos bajó un poco la intensidad y el Pontevedra intentó cambiar su discurso. Fue en ese instante cuando Catú asomó la cabeza y batió a Edu. El gol congeló al Pontevedra y dio alas a un Compos más centrado y con mejores recursos.
El cuadro granate perdió un poco el norte y el Compos aumentó la velocidad de sus acciones, con un motor de más revoluciones y con una mayor aerodinámica. Los blanquiazules pusieron una marcha más y buscaron la sentencia. Entró en acción el nuevo ariete, el balear Guillem Martí, que dispuso de dos buenas ocasiones para noquear al Pontevedra. Primero amenazó con un disparo raso, cruzado y con intención que salió rozando la cepa del poste derecho de Edu. Unos minutos más tarde, un mal control dentro del área impidió que ejecutase un cómodo remate.
Más lluvia
En esos momentos, el diluvio castigó todavía más el césped de San Lázaro y el control del esférico empezó a dificultar las acciones de ambos contendientes. Jordan puso a prueba a Edu y Guillem Martí falló una ocasión que ni él mismo se explica. Un grave error de Capi en el despeje dejó un balón de oro al delantero local, que envió fuera un remate cuando la afición ya cantaba el gol.
En la recta final del primer tiempo, el Compos se fue atrás y empezó a ceder terreno por el miedo al empate y por el empuje del Pontevedra, que jugó sus mejores minutos del partido. Jacobo y Borjas tuvieron dos buenas ocasiones para empatar, pero sus lanzamientos no encontraron el destino deseado.
Segundo gol
La réplica de la escuadra granate fue realmente un espejismo, pues el segundo acto arrancó de nuevo con el dominio del Compostela, que anotó el segundo en otra acción de estrategia. El central Catú repitió y hundió al rival.
Con el 2-0, el Pontevedra bajó los brazos. No fue capaz de reaccionar ante el buen hacer de los compostelanistas. Luisito movió ficha incluso antes del segundo gol, pero no encontró el efecto deseado sobre sus jugadores. Lejos de mejorar, el Pontevedra perdió todas las batallas que se propusieron en el terreno de juego. Ya con el segundo remate de Catú, el once granate tiró la toalla al ver que era incapaz de dar dos pases seguidos con cierta coherencia.
Rebasado el primer cuarto de hora del segundo tiempo, un trallazo de Manu Rodríguez, tras una asistencia de Jordan, provocó el delirio de una afición que esta vez sí pudo sonreír. Y eso que Bicho, en el tiempo de descuento, falló un penalti que Kevin le hizo al portugués Camacho y le costó una segunda amarilla por lo que se perderá el duelo contra el Rácing de Ferrol de la próxima semana.
Goles: 1-0, min 24: Catú.
2-0, min 52: Catú.
3-0, min 61: Manu Rodríguez.
Árbitro: Leandro Carbajales (asturiano). En el minuto 92, expulsó por doble amonestación al pontevedrés Kevin, en la acción del penalti. También amonestó a los locales Goti, Catú y Josu; y a los visitantes Queijeiro, Pablo Carnero, Capi y Antonio.
Incidencias: Partido de la jornada 24 del grupo primero de Segunda División B disputado en el estadio de San Lázaro. Más de mil aficionados en las gradas, en una tarde fría y lluviosa, con un terreno de juego encharcado.
Pato Guillén, Josu, Jimmy, Catú, Sergio Sánchez, Portela, Manu Rodríguez, Javi Moreno, Goti (Bicho, min 66), Jordan (Camacho, min 71) y Guillem Martí (Chiño, min 83).
Edu, Adrián, Verdú, Campillo (Jandrín, min 59), Capi, Kevin, Queijeiro, Jacobo, Antonio, Hugo (Pablo Carnero, min 54) y Borjas.