El peor incendio en el casco histórico tras el de San Francisco mutila A Ferrería

La Voz LÓPEZ PENIDE

PONTEVEDRA CIUDAD

Un voraz fuego arrasa el edificio de La Moda Ideal y obliga a desalojar otros dos inmuebles

02 feb 2016 . Actualizado a las 14:16 h.

En cuestión de minutos, lo que parecía que iba a ser un pequeño incendio en una tienda del centro de Pontevedra se convirtió este lunes en un fuego voraz que arrasó un edificio entero del casco histórico y que amenazó con llevarse por delante los inmuebles colindantes. Se trata del peor incendio en la zona antigua tras el que afectó a la iglesia conventual de San Francisco en 1995.

Ahora se investiga el origen de las llamas, que se extendieron a una zapatería contigua y a un laboratorio fotográfico que, según apuntaban algunos vecinos, ocupaban el tercer y el último piso del inmueble. El incendio se acompañó de varias explosiones que, según las primeras hipótesis, se generaban a medida que el fuego devoraba los cuadros eléctricos. La Praza da Ferrería, el corazón de la vida social de la ciudad, se llenó rápidamente de curiosos que observaban atónitos e impotentes cómo las llamas devoraban el edificio hasta destruirlo, con el consiguiente riesgo de desplome. El tejado, de hecho, no pudo soportar las elevadas temperaturas que se alcanzaron durante el incendio y se derrumbó.

Pasados los primeros momentos de tensión se pudo comprobar que no hubo que lamentar daños personales y que solo dos personas, una de ellas de 83 años, tuvieron que ser atendidas de leves intoxicaciones por humo.

Hicieron falta varias dotaciones de bomberos de Pontevedra, a los que se unieron los de O Morrazo, para controlar el incendio. Los bomberos tuvieron que usar equipos de respiración autónoma. En el momento de máxima intensidad las llamas eran visibles desde buena parte de la ciudad y llegaron a superar la altura del edificio.

Una tienda fundada en 1896

En el bajo del inmueble afectado por el fuego estaba instalada desde el año 1896 la tienda de telas La Moda Ideal. Todo el mobiliario interior, de madera, ha sido pasto de las llamas. Según la empleada de un establecimiento contiguo, en declaraciones a Europa Press, «acababan de recibir la nueva colección» de tejidos.