Los militares de la campaña de la Antártida, que dirige un oficial de la Brilat, comienzan este lunes un adiestramiento en aguas de San Vicente
29 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Temperaturas de hasta 19 grados bajo cero, vientos que rondan los 120 kilómetros por hora y un volcán activo son los elementos con los que tendrán que convivir los trece militares que el próximo otoño participarán la veintinueve Campaña Antártica, una misión que por primera vez dirigirá un militar de la Brilat, el comandante Alberto Salas. Con el objetivo de preparar esta misión, desde este lunes y hasta el próximo 4 de septiembre, el contingente se adiestrará en aguas de San Vicente de O Grove.
El objetivo es que durante estos días, los militares reciban «formación sobre navegación y movimiento, normas de seguridad y reglamentos de marcas y señales». Así, se entrenarán «en el manejo de embarcaciones neumáticas del mismo estilo de las que tendrán que utilizar en las frías aguas polares», destacaron desde el Ministerio de Defensa.
Consideran que esta practicas son esenciales para garantizar ya no solo la seguridad de los propios soldados, sino del personal civil -los científicos- con los que convivirán durante la campaña. Así, se pondrá especial énfasis en el montaje y desmontaje de las embarcaciones, su navegación a la hora de entrar y salir de playas o el uso del GPS, pero también llevará a cabo saltos al agua y aprenderán a emplear el traje de supervivencia, cuya utilización en aguas del Antártico puede significar la fina línea que separa la vida de la muerte.
Responsables de la Campaña Antártica, la misión más antigua que desarrolla el Ejército de Tierra, precisaron que el motivo de esta preparación tan exhaustiva responde a «las características del entorno en que se mueven los investigadores, a los que se apoya logísticamente». No en vano, la base Gabriel de Castilla se ubica en la isla Decepción que «es, en realidad, el cráter de un volcán emergido, cuya caldera se encuentra inundada, debido a que parte del cráter está por debajo del nivel del mar».
Al frente de este operativo se sitúa el comandante Alberto Salas, quien llegó a la Brilat de Pontevedra en el 2012. No obstante, no es la suya la única representación gallega de esta misión. Bajo su mando estarán, entre otros, el comandante Pedro Solís, natural de Pontevedra y responsable de medio ambiente, y el sargento primero Diego Núñez, oriundo de Ourense y auxiliar de comunicaciones.