El proyecto, que generaría 300 empleos, lleva 12 años tramitándose
16 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.«A Xunta ofrece a súa colaboración ao Concello de Pontevedra e aos promotores do solo urbanizable do Vao para acadar a aprobación definitiva do proxecto». Ese es el titular de la nota que distribuyó ayer la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas para dar cuenta de la reunión que la secretaria xeral de Urbanismo, Encarnación Rivas, mantuvo con técnicos municipales para, según había anunciado el propio departamento autonómico, «desbloquear» la ampliación del polígono comercial entre la PO-531 y la AP-9.
Pero desde el Concello se ofreció una versión muy diferente del encuentro de ayer. Ni hubo tal desbloqueo ni la reunión «serviu de moito», a juicio de la concejala de Urbanismo, Carme da Silva, que lamentó que la Xunta «non convocara esta reunión antes de emitir o informe co que anula a modificación que aprobou o pleno por unanimidade».
Según Da Silva, los representantes autonómicos se limitaron ayer a verbalizar el informe «cando o normal sería que viñese acompañado dunha proposta de corrección, para que os cambios se fagan como eles entenden que se deben de facer». Existe una «clara discrepancia» entre los técnicos de la Xunta y los del Concello que desde Pontevedra se entiende que ha de resolverse en Santiago «pois as competencias para aprobar o proxecto son autonómicas».
Zonas verdes
Según la consellería, el proyecto debe computar el 10 % correspondiente a zonas verdes dentro del ámbito, y hay que aplicar un tratamiento vegetal de la fachada hacia la autopista «tendo en conta a alta fraxilidade desta orientación polo elevado volume diario de vehículos». En este sentido, desde la Xunta se sugiere una «pantalla vexetal que conecte coa zona verde».
También hay un problema con la permuta que los promotores han de hacer con Fomento para dejar espacio a una hipotética ampliación del peaje de la AP-9. Fomento solo aprobará la permuta cuando la modificación esté en vigor, y la Xunta no aprueba la modificación si la permuta no se firma antes.
Sea como fuere, lo cierto es que mientras unos y otros se ponen de acuerdo, el proyecto sigue bloqueado. Y ya van más de doce años de tramitación de un proyecto que está contemplado en el Plan General de Urbanismo.
La ampliación del polígono comercial de O Vao prevé ocupar una franja de terreno entre la PO-531 y la AP-9. Originalmente el ámbito era de cien mil metros cuadrados, pero el Plan de Ordenación do Litoral, la afección de la propia autopista y otras circunstancias fueron reduciendo ese espacio hasta dejarlo en 43.000 metros. Los promotores afirman que su desarrollo generará unos 300 puestos de trabajo, ya que tienen firmados preacuerdos con firmas como Decathlon, Aki, McDonalds o Kiabi para establecerse en el polígono.