24 may 2015 . Actualizado a las 05:05 h.
A pesar de que el Marcón ya ha festajado una vez la permanencia en Preferente este año, tendrá que volver a pelear por ella. Y es que la presunta alineación indebida del Pontevedra B ante el Erizana (el máximo rival por la permanencia de los de Carlés) les obliga a reengancharse a esa lucha por eludir la quema del descenso.
El técnico cuenta con diez bajas sensibles de la primera plantilla por diversos motivos (lesiones, sanciones, un jugador que regresa a Rusia y uno que será vocal en una mesa en las elecciones municipales). Con la victoria ante el Arenteiro a domicilio (18 horas) se salvaría y no dependería de otros resultados.