Dos rachas opuestas rotas y un equipo casi infalible fuera
PONTEVEDRA CIUDAD
El Lalín y el Estudiantil vieron como sus rachas se rompían. Los rojinegros llevaban cinco jornadas sin perder (cuatro triunfos y un empate) hasta caer frente al Arenteiro por 4-2, que también supone el partido en el que más tantos encajaron. Pese a ello se mantienen segundos. «O importante é que seguimos aí metidos», dijo su entrenador, Luis González Pichel, quien dio las gracias a los aficionados que acudieron a un partido vistoso y con gran ambiente en la grada. Aprovechó para pedir imágenes similares en el Cortizo. «Teñen que apretar máis», dijo.
Pero si los dezanos vieron rota su buena racha, el Estudiantil cortó la suya mala. Llevaba seis jornadas sin ganar, tras cuatro derrotas y dos empates, al que pusieron fin ante el Xallas con un 3-0 en el debut del Mougán en el banquillo. Fue su triunfo con más goles tras la del Dumbría.
Por su parte, con el triunfo ante el Pontevedra B continúa mostrándose letal lejos de su hogar. Solo perdió un partido como visitante. Un triunfo que les mantiene en el ecuador. «Con solo cinco puntos más, estaríamos a tiro de piedra del ascenso», aseguró Tinto, al recordarle partidos en los que se dejaron puntos, como el último en casa, pese a mostrarse superiores.