La solución al exceso de gaviotas está en el control de los residuos

Juan Ventura Lado Alvela
J. v. Lado CEE / LA VOZ

PONTEVEDRA CIUDAD

P.CHAPELA

El ornitólogo José Luis Rabuñal dice que los traslados de Pontevedra a la Costa da Morte no tienen impacto ni eficiencia

04 sep 2014 . Actualizado a las 14:38 h.

El traslado de 123 polluelos autónomos de gaviota patiamarilla, larus michahellis, de la ciudad de Pontevedra a zonas de acantilados de Camariñas, Fisterra y Muxía, que ya ha generado algunas críticas a nivel local, no supone un problema pero tampoco una solución en palabras del ornitólogo José Luis Rabuñal.

El especialista, uno de los mejores conocedores de los hábitats de las aves marinas en la Costa da Morte, explica que para se produjera un impacto en el ecosistema los movimientos deberían ser muy masivos y, aún así, el efecto no estaría garantizado. «Es un error pensar que las gaviotas viven en los acantilados. En estas zonas solo crían, pero no se van a quedar allí porque no son plantas. Lo que hará será buscar zonas de alimento, fundamentalmente en terrenos bajos y en los puertos», afirma Rabuñal, quien añade que no se puede determinar en que áreas se asentarán los animales en caso de que sobrevivan. Pueden desplazarse decenas de kilómetros, incluso hacia sus lugares originales de las Rías Bajas de nuevo.

Aunque advierte de que no tiene un conocimiento directo de este caso, el ornitólogo incide en que la superpoblación de gaviota patiamarilla es una realidad en toda la costa gallega y se puede constatar con los anidamientos en los tejados de Camariñas, Muxía o Laxe.

Cuestión social, no ornitológica

Sin embargo, eso no significa que en todos los lugares se den problemas graves como los que aparentemente tienen en la ciudad de Pontevedra, explica.

«Esto no es una cuestión ornitológica, sino más bien social o política porque no se explica muy bien cómo lo que no quieren en un lugar se lleva a otro. En principio no parece bonito, ya se trate de gaviotas o conejos, aunque insisto en que con estas cantidades no debería suponer impacto alguno», señala Rabuñal.

A juicio del experto en aves, la solución a esta superpoblación hay que buscarla en la gestión eficiente de los residuos urbanos y pone como ejemplo el caso de A Coruña que conoce directamente, donde sigue habiendo muchas gaviotas pero han descendido de manera significativa desde que se abordó la cuestión del vertedero de Bens. «Van a donde encuentran alimento, así de sencillo. Incluso en Madrid durante el invierno se encuentran en grandes cantidades que vienen del norte de Europa. Con lo cuál se trata de ir a la raíz del asunto y solucionar esto o adoptar otras medidas como picar los huevos en los nidos», concluye.