Las olas de Bares estuvieron a punto de batir su récord histórico de 12,9 metros

La Voz

PONTEVEDRA CIUDAD

04 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Este invierno va camino de batir todos los récords, de lluvias y de oleaje. El pasado día de Reyes fue la boya de cabo Silleiro, en Pontevedra, la que batió su récord histórico con 11,5 metros de altura significante; el pasado sábado fue la de Estaca de Bares la que a punto estuvo de rozar su máximo, de 12,9 metros. Alcanzó 12,77 a las 21 horas.

La altura significante es la que se calcula a partir del tercio de olas más altas medidas durante un período de 20 minutos. Las alturas máximas de ola, que no son obtenidas hasta que se realiza el mantenimiento de las boyas, se pueden estimar estadísticamente como 1,6 veces la altura significativa. Eso quiere decir que, a la espera de datos definitivos, es de esperar que en Estaca de Bares se hayan registrado alturas de olas individuales de más de 20 metros de altura. A diferencia del fuerte oleaje del día de Reyes, que fue de componente oeste y afectó más a las Rías Baixas, el mar de fondo del pasado sábado afectó a la zona noroeste de Galicia y al Cantábrico. Incidió, además, explica Jorge de los Bueis, presidente de la asociación de oceanógrafos de Galicia, que hubo unas mareas vivas muy potentes, a las que se unió una subida adicional de nivel debida a la propia tormenta.