Cuando se van a cumplir ochenta y dos años desde su primera actuación, la Coral Polifónica de Pontevedra respira aires de cambio.
Manuel Fernández Cayeiro comunicó esta semana a la directiva de la entidad que esta será su última temporada como director de la coral. Tiene 71 años, reside en Vigo y reconoce que, después de diez años de dedicación plena, le supone un considerable esfuerzo desplazarse dos veces por semana a Pontevedra en horario nocturno para los ensayos, sobre todo en los meses de otoño-invierno.
Fernández Cayeiro manifestó ayer que da por cumplida una etapa. «Hace falta renovación y nadie es imprescindible», dijo. Calificó de muy positiva esta última década, en la que la Polifónica mantuvo una importante en proyección en la vida cultural de la ciudad, en el resto de Galicia e incluso en otras ciudades españolas y en el extranjero. La celebración del 75 y del 80 aniversario de la agrupación, la publicación de un libro y la grabación de un disco fueron algunos de los hitos importantes de su etapa.
Cayeiro perteneció a la Polifónica entre los años 1955 y 1967 y ya fue director en el período 1964-1967. En aquella primera época sucedió al maestro Iglesias Vilarelle y, cuando volvió a dirigir la coral, en 1998, relevó en el puesto a Verea Montero, que llevó la batuta durante 18 años.
Su sucesor a partir de la próxima temporada está por determinar, pero cree que en el Conservatorio de Música hay gente capacitada y citó también como cantera a la Banda de la Escuela Naval Militar de Marín.
Según reconoció, la renovación con voces jóvenes es también una necesidad constante, como en cualquier coral. Actualmente, la Polifónica cuenta con unos 50 cantores, aunque no todos pueden asistir a los ensayos y estar siempre disponibles.
Fernández Cayeiro aprovechó la última asamblea de socios de la Polifónica para solicitar el relevo. Fue una asamblea en la que también hubo renovación en la directiva, aunque con un único cambio significativo en el cargo de secretario, para el fue elegido Carlos Pino.
Carlos Valle, que fue reelegido presidente de la sociedad, declaró ayer a Radio Voz que todavía no hay nombres para sustituir a Cayeiro, «tarea fundamental que tiene por delante toda la coral y muy en particular toda la junta directiva». Valle también incidió en la necesidad de voces jóvenes para ir renovando paulatinamente en la coral a quienes por edad tienen más dificultades para continuar, al tiempo que reconoció que dedicarse a una actividad como esta, honorífica y gratuita, en los tiempos que corren supone un «enorme sacrificio».