Un monumento polémico con dos décadas de vida

La Voz

PONTEVEDRA CIUDAD

17 nov 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Dos décadas de vida acumula ya la gran cruz de la Alameda, integrada en el Monumento al Soldado, obra de Alfonso Vilar Lamelas, que fue encargado e impulsado por el ex alcalde Rivas Fontán.

Uno de los principales problemas a los que se enfrenta el Concello para el posible traslado es el peso y las grandes dimensiones del conjunto. Este temor al efecto del peso sobre la estructura del aparcamiento llevó ya en el 2000 al Concello a descartar otras actuaciones en la zona a fin de no sobrecargar más los pilares del párking subterráneo. En concreto, fue a parar al cesto de los papeles una incitativa para conectar en tierra la Alameda y las Palmeras por encima del enlosado de hormigón.

La gran cruz actual, que va forrada en piedra, está dotada de una estructura metálica y de hormigón. El conjunto tiene unas dimensiones de unos 16 metros de alto, por 8,20 de ancho y 3,40 de fondo. Las dimensiones de los grupos son de 3,45, por 2,10 y 1,05 metros.

Bajo la cruz, un conjunto escultórico representa a un soldado herido, ayudado por dos compañeros, todos ellos de pie. Otros dos grupos escultóricos, situados a los dos lados de la cruz, representan la misma temática, pero con soldados moribundos que son auxiliados por compañeros que se inclinan para sujetarlos en brazos. La inauguración del monumento suscitó en 1986 una amplia polémica ciudadana en Pontevedra por el parecido de algunos rostros con el alcalde de la época. El monumento sufrió posteriormente un ataque con botes de pintura roja.

De momento, en las conversaciones entre concejales de los grupos municipales no se ha planteado el posible destino que tendría el monumento, es decir, si sería desplazado a un nuevo emplazamiento o almacenado en espera del mismo.

En el año 2000 se había barajado la posibilidad de llevarlo al cementerio municipal de San Mauro. El conjunto se iba a ubicar en la parcela que ocupa el Monumento a los Caídos, parcela que pertenecía a Defensa, según los datos en poder del Concello de Pontevedra.