Comunidades de montes exigen en Outes dejar de tributar como empresas

Chechu López RIBEIRA

PONTEVEDRA CIUDAD

La entidad que aglutina a 134 asociaciones gallegas estudia iniciar movilizaciones La agrupación vecinal de vigilancia forestal empezará a funcionar a finales de mayo

25 mar 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

La Organización Galega de Comunidades de Montes Veciñais en Man Común celebró en Outes su asamblea general ordinaria en la que se abordó la fiscalidad que están sufriendo estas entidades teniendo que tributar como si fuesen empresas, cuando en su mayoría son asociaciones sin ánimo de lucro. Los asistentes expresaron su rechazo y reclamaron que el Estado no les obligue a pagar impuestos, pues la mayor parte de sus ingresos van destinados a obra social y a inversiones en el propio monte, «facendo as veces aquelas obras nos lugares e parroquias que non fan as administracións», dijo su presidente, Xosé Alfredo Pereira. Los directivos de la entidad informaron a los 94 representantes asistentes de las 134 comunidades que integran este colectivo que la Asociación Forestal de Galicia les solicitó que se sumasen a a una petición de mejoras en relación con esa «inxusta fiscalidade», pero recordaron que fue esa misma agrupación la que defendió esa tributación, que decían sería ventajosa para los montes. «Nos mantivemos sempre a postura en contra desta fiscalidade, na que nunca nos deberon meter. Por iso continuaremos na nosa loita por eliminar este réxime de imposto de sociedades para las comunidades de montes, e que só aquelas que reparten beneficios teñan que facelo», matizó la vicepresidenta de la entidad, Pilar Santamaría. Protestas En caso de que no logren ningún avance a corto plazo, esta organización de comunidades de montes no descarta iniciar movilizaciones ciudadanas, recogidas de firmase incluso promover una iniciativa legislativa popular o buscar otra fórmula para obtener sus objetivos. También se presentó en Outes la agrupación vecinal de vigilancia forestal promovida por la Consellería de Medio Rural y gestionada por las comunidades de montes que se prevé empiece a funcionar a finales de mayo. Con ella se pretende recuperar la relación entre el monte y los ciudadanos e involucrar a los comuneros en la custodia de sus propiedades. Del mismo modo, se informó de una iniciativa del Servicio de Montes de Pontevedra para ayudar a las comunidades que tengan dificultades para vender la madera quemada, y que podría extenderse a toda Galicia. Otro de los debates de la asamblea se centró en la Lei de Prevención de Incendios Forestais que se someterá mañana a aprobación en el Parlamento. Se hizo referencia a las alegaciones no aceptadas -dos de seis- y que se remitieron a los distintos grupos políticos, pero que aún no recibieron respuesta. En este sentido, se hizo especial referencia al hecho de la eliminación de la tasa de extinción, pues esta organización gallega no entendía que los propietarios pagasen por sofocar al ser los incendiarios los responsables directos de los fuegos.