Andrés Díaz: «El formato de las fiestas de este verano es de eventos pequeños, tranquilos y controlados»

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTE CALDELAS / LA VOZ

PONTE CALDELAS

CONCELLO DE PONTE CALDELAS

La plaza de España y la Alameda de Ponte Caldelas se han convertido en una gran terraza donde se celebran actividades de formato limitado

29 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El coronavirus ha obligado a los concellos de toda la comarca a suspender actividades y festejos. Ponte Caldelas ha tenido que reinventar su programación de los Dolores, que se celebra este fin de semana.

-¿Cómo se han diseñado estas actividades?

-Mantenemos el formato que llevamos haciendo en todo el mes de julio y agosto, con pequeños eventos, de menor entidad. Estamos también contribuyendo a un terraceo controlado, que hemos establecido de mesas autorizadas y zona vigilada, que está siendo positivo para la economía de los comercios y sobre todo de la hostelería, que buena falta les va a hacer para pasar el invierno y al mismo tiempo de forma segura. Nos planteamos este formato porque este es un año atípico y no podemos hacer otra cosa y aún así, haciendo esto con mucha cabeza, con mucha responsabilidad de todos y cruzando los dedos para que todo salga bien.

-¿Qué más cambios ha habido?

-Pues, no hay procesión, ni las verbenas, simplemente hay eventos por la noche de menor entidad, tranquilos y controlados. Es la primera vez en la historia que pasa algo así en las fiestas de los Dolores, pero creo que todo el mundo lo ha entendido perfectamente. Queremos intentar que se esté todo controlado, que podamos entre todos ayudar a la economía local, sobre todo a la hostelería y al comercio, y ganando fuerzas para que en el 2021 las fiestas sean otra vez como siempre.

-La verbena se ocho horas de la última noche se ha caído del programa. ¿La echará de menos?

-Sí, claro. El martes sería la verbena que dura hasta las ocho de la mañana y al día siguiente es festivo local. Yo la echaré en falta, pero sobre todo la juventud, porque es una noche muy tradicional y típica y después por la mañana tomar una taza de caldo o una taza de chocolate con churros. Esas cosas este año no se van a poder hacer y ni siquiera la tradicional procesión del martes es que multitudinaria. No sabría definir las fiestas de este año, porque es como si no las hubiese, pero a la vez intentamos hacer cuatro cosillas para contribuir a intentar ayudar al comercio y a la hostelería.

-La celebración de fiestas, aunque sean mínimas, en el verano del covid puede preocupar a mucha gente. ¿Qué seguridad le ofrece a los que asistan a los conciertos o a las actividades?

-La Alameda y la plaza de España las distribuimos durante estos dos meses con los hosteleros, con una separación de cuatro metros entre mesas. Cada bar o restaurante tiene un número de mesas autorizado, que además tiene que tener una pegatina y ese es el espacio que se puede ocupar. Evidentemente el aforo es mucho más limitado, es el que hay, el que venga tiene garantía de que tiene esa separación, control y distancia, pero que se puede dar la circunstancia de que no haya sitios libres y no se pueda sentar. El evitar aglomeraciones es en este momento fundamental y esa situación tenemos que entenderla y adaptarnos.

-¿Qué más requisitos tiene que cumplir la gente que se acerque?

-Tiene que entrar por supuesto con mascarilla, desinfectarse las manos hay dosificadores en las entradas y solo se podrá sacar la mascarilla una vez sentado. Estamos avisando a los hosteleros todas las semanas, que lo están haciendo muy bien, para que se cumpla. Hay que desinfectar mesas y sillas antes que se pueda sentar nadie más. En ese sentido creo que está saliendo bien, la gente que viene de fuera nos comenta la seguridad y por lo tanto la tranquilidad de poder disfrutar aquí. Se nos ha quedado el aforo algo pequeño, pero la seguridad es muy importante.

-¿En qué va a consistir el espectáculo de la fuente luminosa de esta noche?

-Hemos aprovechado la plaza de España que está unida a la Alameda y entonces uno puede ver el espectáculo de la fuente luminosa desde cualquier punto. Son más de ocho mil metros cuadrados entre las dos. Es un gran espacio público, donde se puede disfrutar de las actividades que se hagan allí, sentado y con la distancia de seguridad. Serán cinco canciones que harán bailar a la fuente, que le encanta a la gente. Este año hemos aprovechado para instalar un sistema de megafonía integral a lo largo de toda la Alameda y plaza de España, que son cuarenta micro altavoces para generar ese sonido ambiente y está funcionando bien. También a través de esa megafonía cada diez o quince minutos recordamos que hay que entrar con mascarilla y todas las medidas higiénico sanitarias que hay que cumplir ahora mismo, pero creo que es necesario para concienciar a los asistentes.

-Este verano también se ha podido llevar a cabo la nueva edición de Caldelas Tapas. ¿Qué balance hace?

-Muy bueno. La idea inicial era que fuese solo los cuatro viernes del mes de julio. Como la rotación es menor y la desinfección de mesas y sillas y para evitar aglomeraciones, se amplió a agosto. Ha funcionado mejor que ningún año, así que el balance por parte de la hostelería es muy positivo.

-¿Qué se plantea para otoño?

-Para la primera semana de septiembre vamos a hacer una serie de eventos para los niños, cuentacuentos, eventos musicales por los pueblos y en el casco urbano, como homenaje a los niños que más han sufrido en esta pandemia. Les hemos quitado su infancia durante este tiempo sin poder ir al cole ni con los amigos ni entrar al fútbol o ir al parque y se han comportado bien. Por eso este pequeño homenaje para los niños.