La Fiscalía brasileña acusa de homicidio a los policías que mataron a un gallego

M.H. PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTE CALDELAS

Marcio Pérez, con origen en Ponte Caldelas, murió tiroteado

09 ene 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La vida de unos padres de Ponte Caldelas se paró el 19 de septiembre. Desde Brasil les llegó la peor de las noticias: habían matado a su hijo, Marcio Pérez, de 41 años. Lo había tiroteado la policía. Les contaron por teléfono que se había saltado un control policial cuando iba en coche, que le dieron alcance y que acabaron disparándole por error. Pero ni ellos ni el resto de la familia creyeron esa versión. Decían que Marcio, que aunque natural de Galicia se crio en Salvador de Bahía, conocía la ciudad como la palma de la mano, y era imposible que se saltase un control. Estaban en lo cierto. Pronto se supo que semejante cosa no había pasado y que los policías actuaron fuera de su zona de trabajo, que no hacían ningún control, que no llevaban luces... Hace unos días estos agentes fueron encarcelados. Y ahora se ha dado un nuevo paso para esclarecer el crimen: el fiscal acusa a los dos agentes de homicidio.

El Ministerio Público sospechó desde el primer día de la versión que los policías militares habían dado. De hecho, el fiscal ya dijo en septiembre que podría hablarse de homicidio. Pero la Justicia en Brasil tiene tiempos distintos que en España y los agentes, en vez de ser detenidos tras la muerte, pasaron tres meses trabajando tranquilamente en las oficinas policiales -solo los apartaron de las patrullas callejeras-. Eso sí, hace unos días fueron detenidos y enviados a prisión preventiva. Ahora, además, el fiscal confirma su acusación. Sostiene que cometieron un homicidio calificado y los acusa también de un intento de homicidio contra la mujer que estaba en el coche con Marcio Pérez en el momento del tiroteo, que salió ilesa.

«A ver qué hace el Gobierno»

José Antonio, tío de Marcio, recibía ayer con optimismo la noticia de la acusación del fiscal. Eso sí, recordaba que lo que le preocupa a la familia es la situación en la que quedaron las dos huérfanas, que no tienen sustento tras morir el padre. Dijo que viajará con la madre de Marcio a Brasil en breve. «A ver qué hace el nuevo Gobierno de Brasil, esperemos que nos ayude. Este crimen pone en duda la honorabilidad de la policía brasileña».