Fallece Vicente Cerdeiriña, el párroco que impulsó la nueva iglesia de San Salvador de Poio
POIO
Este martes se oficiará el funeral en este templo levantado en el 2000
23 jul 2024 . Actualizado a las 17:02 h.Quien durante más de cuarenta años fue párroco de San Salvador de Poio, Vicente Cerdeiriña Vázquez-Ulloa, falleció tras una larga enfermedad. Desde el 2019 era también administrador parroquial en Virgen del Camino (Pontevedra) y arcipreste de Lérez. Natural de A Coruña, fue velado este lunes en el tanatorio de Poio, mientras que hoy, martes, se oficiará, a partir de las 12.30 horas, su funeral en la iglesia de San Salvador. Posteriormente, recibirá sepultura en el cementerio parroquial de San Pedro de Orazo, en A Estrada, donde había establecido su domicilio.
«A verdade é que no meu caso, así de primeiras, a chamada de Deus pois parecía algo fóra de lugar... Meu pai era dentista e eu era o único fillo varón. Supúñase que estudaría o mesmo ca el e que seguiría coa consulta. Eu pensei que era unha pena que Deus chamara a alguén que tiña a vida solucionada, que podía chamar a outro», señalaba en un reportaje publicado en La Voz en el 2018. Una década después de ordenarse sacerdote, Cerdeiriña Vázquez-Ulloa recaló en Poio, donde reconocía que uno de los grandes hitos tuvo lugar en el 2000 con la construcción de «unha igrexa nova. É algo que non se fai todos os días ou en cinco anos, como case que o fixemos aquí. Levounos entre cinco e seis anos o construír un templo novo e mais os locais parroquiais».
La cruza de esta moneda se produjo en el 2017 cuando no se pudieron celebrar las fiestas del Divino Salvador, una situación que Vicente nunca había vivido en sus entonces 39 años al frente de la parroquia. Esta situación fue consecuencia de la dimisión de la que hasta entonces era la comisión de fiestas, de tal modo que nadie cogió el relevo. La situación, finalmente, se normalizó en el 2018 y los vecinos pudieron disfrutar, de nuevo, de sus fiestas.
Licenciado en Teología y Filosofía, fue uno de los primeros sacerdotes en oficiar la liturgia en gallego, algo que él mismo reconocía que no fue traumático, «tal vez porque non se fixo de golpe, senón que se fixo a modiño. O do galego, por exemplo, levounos durante case un ano. Acostumando á xente a cantar, a rezar, a responder... Pouco a pouco, cacho a cacho, e saíu moi ben».
Antes de desembarcar en Poio, a donde llegó con 34 años, pasó por A Estrada, donde estuvo cinco años, y por la parroquia de Santa María de Pontevedra. En sus conversaciones solía salir a relucir una anécdota que deja claro su querencia por el gallego y que tuvo lugar durante un viaje a Jerusalén, donde observó que «no templo do Pater Noster había un mosaico co nosopai en máis de cincuenta idiomas. Estaba o castelán antigo, o actual, o éuscaro ou o catalán... e faltaba o galego». Tras acudir a todas las instancias que se le ocurrió, finalmente logró que la Xunta interviniese y, en la actualidad, en el mosaico se puede leer el padrenuestro en el idioma que hizo inmortal Rosalía de Castro.
Nada más conocer lo ocurrido, el alcalde de Poio, Ángel Moldes, trasladó el pesar del Concello por el fallecimiento de Vicente Cerdeiriña, al tiempo que destacó la «grande e intensa labor» que realizó en el municipio y, especialmente, en San Salvador. Prueba de ello, las 357 bodas, 1.284 bautizos y 1.288 comuniones que había oficiado hasta el 2018.