Las obras del histórico inmueble rematarán el próximo julio
05 may 2022 . Actualizado a las 12:28 h.
Fue en 1913 cuando el que fue ministro de Hacienda, de Gobernación y Fomento con Alfonso XIII, Augusto González Besada, culminó la construcción de una de las joyas arquitectónicas menos conocidas de Poio, el Pazo de Besada. La suerte de ostracismo en la que se encontraba este conjunto de edificios se debió, en gran medida, a su paulatino declive, una situación que empezó a enmendarse a comienzos del presente siglo cuando se impulsó la urbanización de viviendas de su entorno y se dieron los primeros pasos para recuperar los inmuebles.
Desde este miércoles, un siglo después de su construcción, Pazo de Besada recuperó su esplendor de antaño y se prepara para acoger las dependencias de los Servizos Sociais municipales gracias a una reforma interior en la que se invirtieron más de medio millón de euros procedentes del Plan Concellos de la Diputación de Pontevedra. «Este marabilloso pazo ten uns salóns magníficos e unhas terrazas dignas de ser usadas», remarcó Carmela Silva, al tiempo que se congratuló de que el gobierno local hubiese apostado «tanto pola recuperación do inmoble como polo uso que se lle vai dar, que ten que ver coa política social e con posibilitar actividades tanto para persoas maiores como mozas, e con salas que van acoller diferentes actos (...). Coidar das persoas, facer que haxa equipamentos para atendelas, paréceme que é unha das grandes prioridades dos gobernos locais», añadió, al tiempo que alabó el trabajo de la empresa constructora, Abal.
En este punto, el alcalde Luciano Sobral destacó que la rehabilitación que se está acometiendo es «o último punto no camiño» para dar uso al edificio «e poñelo á disposición da veciñanza». De este modo, recordó que estas actuaciones tuvieron su inicio en la firma del convenio urbanístico que permitió que el Concello asumiese la titularidad de este inmueble y de sus edificaciones adyacentes —la casa de los guardeses, las cocheras y la biblioteca—, que fueron objeto de una reforma previa, así como de la finca exterior que alberga unos jardines que ocupan 7.665 metros cuadrados y donde crecen 23 especies diferentes de plantas.