La policía de Poio ofrece a un grafitero un lugar para poder pintar

POIO

POLICÍA LOCAL DE POIO

El vecino ha rechazado el ofrecimiento de los agentes para que se exprese artísticamente sin enfrentarse a problemas legales

10 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo cazaron con cinco aerosoles en su mochila de tonos similares a los de un grafiti dibujado a escasos cien metros de la sede de la Policía Local de Poio, con las manos manchadas con el mismo color de la pintura, indicios al que se suma el hecho de que las letras de la pintada coinciden con sus iniciales. Pese a ello, este joven de 22 años, vecino de este municipio pontevedrés, negó tener relación alguna con el grafiti. Desde la Jefatura municipal insistieron en que el autor «fue sorprendido in fraganti por una patrulla cuando estaba pintando un grafiti de considerables dimensiones en un muro de las escalinatas del parque de Rosalía de Castro».

Por este motivo se abrieron diligencias por un supuesto delito leve de daños a bienes públicos, una circunstancia que ha determinado que ya haya sido citado a un juicio rápido que se ha fijado para este martes en el juzgado de guardia de Pontevedra. En paralelo, los agentes municipales ofrecieron a este joven la posibilidad de buscar un lugar autorizado donde pudiera realizar grafitis sin enfrentarse a problemas legales y, al mismo tiempo, «potenciar su talento». Sin embargo, y según lamentaron desde el propio cuerpo municipal, este vecino de Poio rechazó el ofrecimiento.

La Policía Local precisó que, en este tipo de casos, se abre la doble vía penal y la administrativa. De este modo, añadieron que, en el ámbito judicial, se puede enfrentar a una multa, localización permanente y hasta treinta días de trabajos en beneficio de la comunidad, además del pago de los gastos que genera la reposición del inmueble afectado a su estado original, valoración que llevarán a cabo desde el Concello de Poio. Por su parte, la vía administrativa conlleva, de confirmarse, una sanción económica por infringir la Ley Orgánica sobre Protección de la Seguridad Ciudadana por «daños o el deslucimiento de bienes muebles o inmuebles de uso o servicio público, así como de bienes muebles o inmuebles privados en la vía pública».

La Policía Local agradece la colaboración ciudadana porque, según revela, ha sido determinante para identificar al infractor. Un viandante, «testigo directo de la ejecución de la pintada», fue quien alertó a los agentes municipales que, a la postre, localizaron al grafitero y, al mismo tiempo, comprobaron que la pintura estaba fresca. Se da la circunstancia de que, en marzo del 2019, la Policía Local identificó a un grupo de menores que estaba haciendo pintadas en estas mismas escalinatas del parque de Rosalía de Castro. Se dio cuenta a la Fiscalía y se procedió a reponer la pared a su estado original.