La Xunta adjudicó 41 boticas nuevas en Galicia. Una de las más solicitadas era la que se abrirá en San Xoán de Poio; se la concedieron a una farmacéutica viguesa
24 ene 2020 . Actualizado a las 10:31 h.Hace unos días, la Xunta adjudicó 41 nuevas farmacias en Galicia tras un largo proceso -no se pueden abrir boticas libremente, es la Administración quién indica dónde, quién y cuándo se pueden instalar-. Un total de 604 farmacéuticos se presentaron al concurso para optar a alguna de esas nuevas oficinas. Y una de las boticas más ansiadas por los profesionales era la que se va a abrir en San Xoán de Poio. ¿Por qué? Porque se trata de un municipio que año tras año gana población, que está a tiro de piedra de Pontevedra y en pleno corazón de las turísticas Rías Baixas. La botica de Poio se la adjudicó una farmacéutica viguesa llamada Elena Rodríguez Castro. Ella, por cuestión de méritos, fue la sexta en elegir de los 41 farmacéuticos que consiguieron las nuevas concesiones. Y lo tuvo claro: quiere abrir su negocio en Poio.
Actualmente, en el municipio poiense hay seis farmacias. Dos de ellas se ubican en la parroquia de San Salvador, una tercera en Campelo y hay otras tres en Raxó, Samieira y Combarro. La que abrirá será, por tanto, la séptima en liza. Tiene permiso para ubicarse en la parroquia de San Xoán. Ayer, el propio alcalde, Nito Sobral, decía que hay expectación con respecto a la nueva botica: «As farmacias son un servizo importante e por poboación a Xunta adxudicou esta nova. Moitos veciños ao sabelo pois si que se preguntan onde se situará e así. Eu sei que era unha botica ansiada porque había máis farmacéuticos interesados nela, de feito algún incluso veu mirar locais xa por se lla daban». Sobral añadió que «se hai interese por abrir aquí é porque a poboación vai a máis, e iso é bo».
En realidad, en la comarca de Pontevedra se adjudicó otra farmacia más. Se abrirá en Barro, concretamente, en la parroquia de Curro, un lugar bastante estratégico porque por ahí pasa la transitada PO-531 o, lo que es lo mismo, la carretera que va desde Pontevedra a Vilagarcía. Aunque hay que decir que en este caso la plaza no estuvo tan disputada. No en vano, un total de 17 farmacéuticos eligieron nueva botica y ninguno pidió Barro. Sí lo hizo la persona a la que le tocó elegir con el número 18. Se trata de una mujer llamada Ana María Fariña Rodríguez. En el caso de Barro, ahora está funcionando una única botica, ubicada en San Antoniño.
En la ciudad de Pontevedra el mapa de farmacias queda igual, ya que no hay nuevas adjudicaciones. Ahora mismo están operativas un total de 41 boticas. Teniendo en cuenta que en el padrón municipal hay unos 84.000 vecinos sale prácticamente a una farmacia por cada dos mil habitantes. Lógicamente, gran parte de las oficinas se ubican en el entorno urbano. Pero, aún así, tienen botica propia lugares más rurales como Xeve, Campañó, Mourente, Tomeza o Salcedo.
«Estoy muy contenta. Poio era mi primera opción desde el inicio»
Cuando a Elena Rodríguez Castro, una farmacéutica de Vigo, le tocó elegir alguna de las nuevas boticas que adjudicó la Xunta solamente se habían dado ya las de Baiona, Oleiros, Cambre-O Temple, Ames y Cambre-Santa María. Así que ella tenía otras 35 para elegir. Pero no lo dudó ni un solo minuto. Se quedó con Poio. Así lo contaba ayer: «Estoy muy contenta. Soy de Vigo y Poio era mi primera opción desde el inicio por muchas razones, entre ellas porque quería tratar de mantener la residencia en mi ciudad. Pero también porque es un municipio que crece y porque creo que, aunque hay más farmacias allí, pienso hay sitio para todos».
Hasta ahora, Elena, de 44 años, no era titular de ninguna farmacia. Trabajó, eso sí, en distintas boticas como farmacéutica adjunta. Tampoco se había presentado antes al concurso de la Xunta: «La otra vez que lo hicieron aún era novel aún», dijo. Señaló que abrirá en cuanto los plazos administrativos se lo permitan.