El Poio Pescamar inicia una remodelación que busca la mejoría

La Voz PONTEVEDRA / LA VOZ

POIO

CAPOTILLO

19 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El Poio que competirá el año que viene en A Seca diferirá bastante del que la afición ha disfrutado este año. El club quiere abrir las puertas y las ventanas de su casa, airear las habitaciones y remodelar los cimientos. Por de pronto, Ale de Paz y Jenny Lores se marchan al Pescados Rubén Burela, que el pasado domingo se proclamó campeón de la Copa de la Reina después de lograr el segundo puesto en liga.

El club poiense aspira a cambiar entre seis y siete caras de todas las actuales, lo que deriva en una reestructuración masiva para un equipo de esta categoría. Otra jugadora que podría abandonar las dependencias del club próximamente es Iria Saeta, a la cual se le ha ofrecido una renovación a la baja. Aunque la futbolista llegó en el 2017 con opciones de ser una referente dentro de la cuadrilla, no acabó de despegar en resultados. Con todo, el balón está sobre su tejado y debe decidir de que lado cae.

Por otro lado, Dani Díaz, el entrenador actual, tampoco ha querido despejar la incógnita sobre si seguirá o no dirigiendo al equipo. Confirma haber llevado «un palo» tras la derrota en la Copa de la Reina, y ni niega ni afirma nada sobre su continuidad dentro del conjunto de las rojillas. «Creo que el club tendrá que valorar la temporada que hice y sentarnos y analizar», explicó.