La subida A Escusa contará con una participación muy por encima de la habitual
14 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Prueba mítica donde las haya. La subida A Escusa es un icono con olor a gasolina para los amantes locales del motor. A las puertas de cumplir sus dos décadas de historia -esta será su edición número diecinueve- la prueba automovilística presenta una salud de hierro, contando este año con una participación muy por encima de lo habitual si miramos las cifras de otras citas gallegas similares, hasta llegar a los 76 pilotos inscritos en esta ocasión.
Entre esos pilotos está, como no podía ser de otra forma, Alexis Viéitez. El gladiador del motor, el héroe de su escudería, el destinado a ser el campeón gallego de montaña un año más. Aunque no podrá hacerse oficialmente con la corona este fin de semana, de ganar la prueba, le bastaría quedar en el vigésimo segundo puesto en A Estrada para que las matemáticas impusieran su criterio. Ambas cosas son probables. El destino ha querido que llegue de nuevo a esta carrera organizada por su escudería, la Buxa Motor Poio, en una situación muy similar a la del año pasado, que se saldó con Alexis rompiendo el motor en casa, lo que le obligó a tener que esperar a la carrera estradense para llevarse la corona gallega. «Tenemos esa espinita clavada de ganar en casa», decía ayer Alexis Viéitez. «Además, este año no me va a volver a volver pasar porque ya llevamos en el camión un motor de repuesto».
Así, con el campeonato casi sentenciado, la subida A Escusa se configura como dos jornadas de auténtico espectáculo y con mucho en juego sobre la mesa para los pilotos que lucharán por la victoria. No solo habrá un gran número de competidores, también estará en el aire el currículo y la calidad demostrada por todos ellos, habiendo nombres altamente reconocibles en la lista.
Permanecerá inalterable el recorrido, que repite el del año pasado debido a las buenas sensaciones de pilotos y público que ha ido cosechando a lo largo de los años. Con salida en Sartal y meta en Castrove, la PO-606 se convertirá en una zona de auténtico pilotaje.
La primera manga oficial del sábado tiene previsto su comienzo a las 15.30 horas. Una hora antes, se cerrará el acceso a la carretera, a las 14.30 horas. De la misma manera, al día siguiente se realizará la misma acción, aunque en esta ocasión la primera manga -cuarta de la competición- se iniciará a las 9.30 horas.
La zona de verificaciones se ubicará en A Seca, Poio, y hasta allí podrán acercarse todos los curiosos que quieran ver los coches participantes realizar los preparativos previos a las mangas oficiales.
Como siempre, la organización quiere hacer hincapié en la importancia de la seguridad y señala que todas las medidas que se toman durante la subida nunca buscan molestar, sino proteger. En ese sentido, el trabajo de señalización de zonas seguras y no seguras se iniciará en los días previos a la prueba automovilística.