El Concello de Poio espera adoptar una decisión en breve tras la negativa mostrada en una reunión con vecinos del barrio
26 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.A Caeira aguarda desde hace años un lavado de cara integral. Y el Concello de Poio tiene prevista una partida de algo menos de novecientos mil euros -570.000 euros para la humanización y mejora de Pernas Peña y la plaza de Riestra; doscientos mil para Camiño Cachada y setenta mil en la calle Illa de Arousa- para acometer esta vieja demanda.
El único escollo con el que se han encontrado es la oposición de un numeroso grupo de vecinos -no todos- que se opone a una de las medidas proyectadas en esta reforma: la de establecer la subida como de dirección única, lo que permitiría ampliar las aceras lo suficiente para dar cabida a peatones y mobiliario urbano. Una negativa que le trasladaron a los representantes del gobierno local en una reciente asamblea.
Gregorio Agís, concejal de Urbanismo, señaló que lo expresado en este encuentro está siendo estudiado, por lo que espera adoptar una decisión en breve, en unos pocos días. Mientras tanto una petición en Change.org rechazando la dirección única ya supera el medio millar de votos.
Los opositores a esta medida argumentan, entre otras cosas, que «esta modificación afectaría gravemente al tráfico en unas zonas muy claras». Por un lado, la calle Ferreirós, «donde la gente casi ni podría salir de los cruces debido a todo el tráfico desviado» y, por otro, la carretera a O Vao, «ya que pasaría a tener mayor tránsito».
Pero, ¿que supone realmente la dirección única en A Caeira? Esta se ha proyectado entre la rotonda de A Barca y la plaza de Estribela, un tramo de 330 metros de longitud. Desde este último punto, su establecimiento supondría dar un rodeo de 740 metros hasta A Barca, distancia que se incrementa hasta los 830 en el caso de los vehículos que, viniendo desde Río Ulla, tomen el cruce del Liceo Casino.
Por el contrario, se reduce a los 620 metros para aquellos usuarios que, procedentes de la carretera de Campañó o PO-310, se dirijan por la rotonda de Mato Calderón hacia el puente.
Pero no todo son incrementos de distancia. Si se toma Riestra como referencia, la dirección única de subida permite ahorrar veinte metros a todos aquellos conductores que se desplacen en dirección a Combarro o Sanxenxo.
Los partidarios de esta propuesta, por otro lado, recuerdan que la dirección única ya se adoptó en los noventa con las calles Río Lérez y Río Ulla sin generar mayores inconvenientes.
Esto en cuanto a vehículo. Para los peatones, las aceras más anchas evitarán, en algunos puntos, que la gente tenga que pisar asfalto en caso de cruzarse con otros viandantes, así como dispondrán de bancos para descansar y que la subida o bajada no sea tan fatigosa.