Sucedió en 1999
13 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Hace hoy 18 años que el que por entonces era el camarero más conocido de Galicia dadas sus gestas, Saturnino González, se dejó ver por la comarca. El hombre era un camarero ciclista, ya que recorría kilómetros y kilómetros en bicicleta llevando en la mano una bandeja con copas. Ahí es nada. Tal día como hoy, de esa guisa, logró coronar el monte Castrove, en Poio, en un tiempo récord de treinta y tres minutos. La Voz de Galicia explicaba entonces que el hombre coronaba los montes a bordo de la bici con el uniforme de camarero, incluso con pajarita, y portando en su mano izquierda una bandeja con doce copas de cristal. También se matizaba que, pese a lo que muchos pensaban, los recipientes de cristal no estaban pegados al metal. Antes de llegar a Poio, González ya había subido al monte Aloia, el lago Castiñeiras o el alto de A Grova. Contaba entonces Saturnino que el puerto más difícil que había coronado era el Angliru y que tardó más de una hora en lograr ascender.