Los psiquiatras concluyen que el parricida de Moraña no padece ninguna patología

Alfredo López Penide
L. PENIDE PONTEVEDRA / LA VOZ

MORAÑA

CAPOTILLO

Los médicos consideran que tenía sus facultades mentales plenas cuando mató a sus  dos hijas

21 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras recibir el informe de los psiquiatras, el fiscal ha concluido que David Oubel tenía sus facultades mentales plenas cuando, el 31 de julio del año pasado, acabó con la vida de sus dos hijas, supuestamente empleando una radial. En un pormenorizado y exhaustivo informe, los peritos descartan que el acusado presente afecciones de índole psicológica o algún tipo de patología mental que hubiera afectado a su voluntad o a su inteligencia, destacaron las fuentes consultadas.

Este documento era la única diligencia que faltaba para concluir la instrucción judicial. En todo caso, y antes de dictar un auto de apertura del juicio oral, la jueza de instrucción de Caldas ha emitido un auto que ha sido trasladado a las partes por si tuvieran intención de solicitar alguna nueva prueba. El plazo dado por la instructora está a punto de espirar y la Fiscalía de Pontevedra confirmó que no necesita más diligencias.

Piden la cadena perpetua

En este sentido, desde el ministerio público confirmaron que nada ha modificado su pretensión inicial de solicitar para David Oubel la máxima condena que prevé el Código Penal desde la reforma introducida el 1 de julio del 2015. De confirmarse, sería la primera vez en España que se solicitase una pena de prisión permanente revisable.

A este respecto, matizaron que la legislación es muy clara, toda vez que prevé esta condena para los casos en los que «la víctima sea menor de 16 años de edad» y las dos hermanas asesinadas, Candela y Amaya, tenían 9 y 4 años. Por otro, señalaron que, a diferencia de otros asesinatos y homicidios donde se imputa al autor un delito por cada víctima, en este caso concreto solo cabe hablar de una única pena para el doble crimen. «No se puede castigar a nadie imponiéndole dos condenas permanentes», insistieron.

En el supuesto de que el jurado popular emita un veredicto de culpabilidad, Oubel permanecería recluido un mínimo de veinticinco años. Y es que solo a partir de entonces se podrá revisar su situación teniendo en cuenta las circunstancias del delito o su conducta en la cárcel.