La Diputación insta al PP a frenar «a tolería» del parque de maquinaria

Serxio Barral Álvarez
Serxio Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

MORAÑA

A las pintadas contra Mosquera y Benítez se sumó ayer una corona mortuoria

27 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

«Instamos expresamente ao PP a que dea orde de parar esta tolería». El vicepresidente de la Diputación Provincial, César Mosquera (BNG), acusó ayer al grupo popular de tener en su mano la capacidad para que cesen las pintadas amenazantes contra él mismo y contra el diputado de Mobilidade, Uxío Benítez (BNG), por el conflicto del parque de maquinaria. Un conflicto, subrayó Mosquera que «ten un orixe político e non sindical, xa que non existe ningunha reivindicación laboral».

El vicepresidente acusó al PP de promover una política «baseada en montar líos» y responsabilizó al grupo popular de que ocho de los nueve plenos de la institución celebrados en este mandato «finalizaran como o rosario da aurora por xente que trouxo ou alentou o PP».

A las pintadas que en los últimos meses han poblado los calles de Pontevedra tildando a Mosquera y Benítez, y por extensión al BNG, de caciques, mentirosos o corruptos, se sumaron ayer nuevos grafitos similares en localidades como Bueu, Barro, Carril, Moraña o Tomiño. Esta última, en la entrada al Concello, estaba acompañada por una corona de flores con una banda en la que se puede leer «Uxío, non te deixaremos en paz».

El gobierno provincial denunció públicamente los hechos ayer y los puso en conocimiento de la Subdelegación del Gobierno. Además, el propio Uxío Benítez anunció que presentará una denuncia a título personal ante la Guardia Civil «porque non sei o que vai pasar mañana». Junto a Mosquera y Benítez comparecieron el portavoz y el viceportavoz del PSOE provincial, Héctor Santos y Carlos Font, respectivamente. Hubo unanimidad al calificar de intolerable y de mal gusto la aparición de la corona mortuoria.

Pese a la iniciativa personal del diputado tomiñés, por ahora estos hechos no serán denunciados ante la Justicia por la Diputación. «Démoslle moitas voltas e en principio non o imos facer. Prefiro non aclarar por que non», señaló Mosquera, aunque posteriormente sí entró a explicarlo: «Se cadra vén [Alfonso] Rueda [presidente del PP provincial] aquí a decirlles o que teñen que facer e denunciamos ante un señor que vai a correr todos os días con el e que é íntimo amigo, co cal xa prevemos o resultado».

Para el PP todas las acusaciones que formuló Mosquera son intolerables. A través de un comunicado, el grupo provincial condenó las pintadas y la aparición de la corona de flores y se solidarizó con Uxío Benítez. «No Partido Popular somos por desgraza os que máis sufrimos a diario este tipo de ataques e nunca se nos pasou pola cabeza dicir que era un partido político o que estaba detrás, incluso cando faltou unha condena expresa de algunha parte», señaló la portavoz del grupo, Nidia Arévalo.

El gobierno ve en la pérdida de privilegios el origen del conflicto

El conflicto del parque de maquinaria tiene dos lecturas. Una es la del gobierno provincial, que subraya que se limitó a poner fin a los «privilexios» de que gozaban buena parte de los 35 trabajadores del servicio, la mitad de ellos de la comarca de O Salnés y uno de cada cuatro, de Ribadumia. Estos dependían en el anterior mandato directamente el presidente, Rafael Louzán (PP), y de su jefe de gabinete, Luís Serantes, y según el actual gobierno, trabajaban casi en exclusiva para concellos gobernados por el partido de la gaviota. Pernoctas, kilómetros y dietas sin justificar inflaban los salarios, sostienen los responsables políticos, hasta sueldos medios de 49.000 euros, cuando un trabajador con la misma categoría en otro servicio cobra un máximo de 32.000. Desde el gobierno se subraya que lo que se está haciendo es regular el funcionamiento del parque y que si se justifican las dietas o las pernoctas, se abonan.

La otra lectura la hace CC.OO., sindicato que está tras las movilizaciones y denuncia un plan de privatización del servicio, algo que se desmiente categóricamente desde el Pazo Provincial.