Los contenedores de basura retoman la calle en Marín

Marcos Gago Otero
M. Gago MARÍN / LA VOZ

MARÍN

Contenedores con pintadas en el suelo en la Praza do Reloxio en Marín
Contenedores con pintadas en el suelo en la Praza do Reloxio en Marín M.G.

Pintadas críticas en la Praza do Reloxio por la mala imagen de los recipientes de basura

25 jul 2022 . Actualizado a las 09:35 h.

Alguien pintó dos veces en el suelo la frase «¡Qué asco!» junto a los contenedores de basura de la Praza do Reloxio en Marín. Es la expresión de una opinión compartida por muchos vecinos, aunque no manifestada en pintadas sino en comentarios, sobre la mala imagen que ofrece la colocación de seis contenedores (tres verdes y tres amarillos) en uno de los principales referentes del ya de por sí maltratado casco histórico marinense. La cuestión es todavía más llamativa si se tiene en cuenta de que estos contenedores están colocados justo al lado de sus homólogos subterráneos, que llevan largo tiempo sin funcionar. Ha llegado el verano, hace mucho calor en julio y el mal olor se suma al hecho de que no todos los usuarios echan la basura dentro del contenedor, sino que a veces la acumulan al lado. Mientras que el Concello de Marín se ha esmerado en mejorar al aspecto de la plaza, con una fuente y dos figuras representativas de la danza de las espadas que se baila allí por san Miguel, la presencia de los contenedores en su actual estado afea y a la vez extraña estando a la vista de todos las entradas, selladas con precinto policial, de los subterráneos.

El Concello de Marín informó en su día que los contenedores subterráneos dan bastantes problemas, por averías y otras cuestiones. Cuando funcionaban en la Praza do Reloxio, era habitual que cada pocos meses se atascasen y hubiese que reponer, temporalmente, los contenedores en superficie que ahora ya han vuelto, aparentemente para quedarse. Por esta razón práctica, también se modificó su uso en el entorno de la Alameda. No solo pasa en Marín. Los contenedores subterráneos ya vivieron tiempos mejores. Por ejemplo, las constantes averías que sufrían en la calle Madrid y los problemas de malos olores en el puerto, en Sanxenxo, motivaron al Concello a suprimirlos y regresar a los depósitos de basura en superficie.

En Marín, los problemas con los contenedores no son exclusivos de la Praza do Reloxio, a escasa distancia, en la rúa da Ponte, hay otros que suelen estar más llenos que vacíos a cualquier hora del día. Aunque hay varios recipientes amarillos para colocar bricks y plásticos es bastante habitual que rebosen por fuera y que, en más de una ocasión, la bolsa destinada inicialmente al contenedor amarillo acabe en el verde, porque no hay donde poner la basura.