El estruendo de los petardos desvela a los marinenses en una noche de toque de queda

Una sucesión de fuertes estallidos despertó esta madrugada a los vecinos del centro de Marín. Fue el tema de conversación en muchas casas nada más despertar a la mañana porque el estruendo que se sintió fue tan grande como para levantar de su sueño al más dormilón. El Concello de Marín desveló esta mañana qué es lo que interrumpió el descanso de los vecinos. Se trató de una caja de artefactos pirotécnicos que alguien colocó en el medio de la calle Secundino Lorenzo, una de las vías que enlaza la Praza do Reloxio con el entorno del mercado. No solo la colocó en el medio de la calzada, con el riesgo que suponía, sino que el autor o autores de este incidente, los encendieron. El resultado fue que en torno a la 1.55 horas de la madrugada se produjo un estallido, al que siguieron media docena más, a cada cual más fuerte en la percepción de los desvelados vecinos, y que además de despertarlos, también obligó a desplazarse hasta el lugar a una patrulla de la Policía Local. Afortunadamente no se produjeron daños en ninguno de los inmuebles ni escaparates de los locales de la calle, según informó el Concello de Marín. Ahora la Policía Local está investigando lo ocurrido e intentará identificar a los autores del suceso, ya que, aparte de que no se puede hacer ese ruido de noche, los vándalos también quebrantaron el toque de queda en vigor desde las diez de la noche, impuesto para frenar la pandemia del coronavirus.

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