Más de 4.600 jóvenes de la comarca ya viajan gratis en los buses interurbanos

El área que cubre el plan de metropolitano de Pontevedra, conformada a estos efectos por los doce municipios del entorno de la capital provincial, implantó poco antes del verano, y justo después del salir del estado de alarma, la Tarxeta Xente Nova, un sistema de la Xunta por el que los menores de 21 años pueden viajar de manera gratuita en los autobuses interurbanos. Desde entonces, son ya un total de 4.663 los jóvenes que han solicitado y utilizan regularmente la tarjeta, según datos facilitados por la Consellería de Infraestruturas.

Pontevedra y Marín son los municipios que tienen mayor número de usuarios (2.234 y 1.153) respectivamente, y la línea que une a ambos municipios, la más utilizada por los usuarios de la Tarxeta Xente Nova. Durante los meses de verano también registró un elevado índice de usuarios la línea de comunica la capital provincial con Sanxenxo, aunque en este caso la cifra ha bajado una vez pasada la temporada estival.

Bueu es el tercer municipio con más usuarios (424), y Sanxenxo y Poio se sitúan en numero similares (256 y 229, respectivamente). Vilaboa está por encima del centenar (111), y por debajo se sitúan Barro (72), Ponte Caldelas (49), Campo Lameiro (46), Moraña (40), Cerdedo-Cotobade (31) y A Lama (18).

Desde el 2016 en otras zonas

La Tarxeta Xente Nova se implantó en el área de Pontevedra el pasado mes de junio, pero en otras zonas de Galicia lleva en funcionamiento desde el año 2016. De hecho, según los datos que aporta la Consellería hay usuarios de la zona de Pontevedra que la tienen desde hace tiempo. Principalmente se trata de estudiantes universitarios que la sacaron en Vigo o en Santiago, y hasta ahora la usaban en esas zonas.

La tarjeta hay que solicitarla a través de la web www.bus.gal, y facilitar los datos que allí se piden se genera una cita en una oficina de Abanca próxima al domicilio del interesado, ya que es la entidad financiera la encargada de expedir la Tarxeta Xente Nova. El sistema que se utiliza es el de reembolso de los billetes. Es decir, que hay que cargar la tarjeta con algún saldo -se subraya que no es necesario disponer de cuenta en Abanca- y una vez que se utiliza en el bus, se reembolsará lo gastado. El reembolso se hace cada quince días, y para hacerlo efectivo es necesario realizar una operación en cualquier cajero de Abanca, e inmediatamente se recibirá el abono de los viajes realizados.

La Xunta establece para este sistema de viajes para menores de 21 años un máximo de 60 viajes gratuitos al mes.

Sigue pendiente el convenio para las dos líneas urbanas

 Hace casi un año, en noviembre del 2019, y tras muchos desencuentros Xunta y Concello de Pontevedra llegaron a un acuerdo refrendado por los técnicos y cerrado por los políticos: refundir en dos las cuatro líneas de bus urbano que cruzan la ciudad de modo y cuyo coste viene asumiendo desde hace mucho tiempo la Administración autonómica. Fue la solución de consenso a una vieja disputa: hacer cumplir a Pontevedra la obligación legal de que como municipio de más de 50.000 habitantes cuente con su propio sistema de transporte público.

Pero cuando se iba a negociar la parte más escabrosa -la financiación-, llegó el estado de alarma, el confinamiento y todo se detuvo. Ahora ambas partes deben retomar las negociaciones, algo para lo que se muestra más interés desde Santiago que desde Pontevedra.

¿Cómo serán las dos líneas urbanas que recorrerán Pontevedra?

Son dos rutas circulares. La primera ruta saldrá de la rotonda de Rosalía de Castro con Manuel el Palacio, e irá por la plaza de Galicia, Eduardo Pondal, Doce de Novembro y A Estrada para dirigirse hacia Montecelo; y de ahí, por Mourente, A Paloma y Os Campos hasta Monte Porreiro. El recorrido de vuelta será similar, pero bajando por Loureiro Crespo.

La segunda línea saldrá de la estación de autobuses y seguirá por Eduardo Pondal, Doce de Novembro, José Casal, Ponte dos Tirantes, Aleixandre Bóveda, Juan Bautista Andrade y Médico Ballina para enfilar hacia el Ponte das Palabras y Monte Porreiro. A la vuelta, hará el mismo recorrido hasta Pasarón y seguirá por Aleixandre Bóveda, Ponte Dos Tirantes, Padre Gaite, Perfecto Feijoo, San Antoniño, travesía de A Eiriña y Eduardo Pondal para concluir en la estación de autobuses.

Se prevé que cada uno de los trayectos lleve alrededor de media hora y que la frecuencia de pasos sea de un autobús cada treinta minutos.

¿En qué punto está la negociación?

En noviembre se cerró el acuerdo técnico ­-de cuatro líneas actuales en dos- y político, con el Concello dispuesto a asumir el déficit que puedan arrojar las mismas, aunque la gestión seguirá en manos de la Xunta. Pero falta por suscribir un convenio que concrete los detalles y permita la licitación de las líneas. Justo antes del confinamiento, la Xunta estaba estudiando el marco jurídico del convenio que han de firmar ambas instituciones, y se estaba pendiente también de la resolución del concurso para adjudicar las concesiones. Desde la Xunta se reconoce que además del estado de alarma, la convocatoria electoral de julio contribuyó también a retrasar una negociación que se espera retomar en breve.

¿Cuándo podrá ponerse en marcha el sistema?

El Concello no tiene demasiada prisa. «O traballo está feito. Que tarde máis ou menos non será un problema», indicaba hace unos meses el concejal de Transporte Demetro Gómez. La Xunta sí que urge que se reactive la negociación para que el Concello asuma el servicio cuando antes.

El plan de transporte a demanda da sus primeros pasos administrativos

 

 

La gran apuesta del Concello de Pontevedra en cuanto a transporte es la implantación de un sistema «a demanda» con el que se quiere facilitar el acceso al casco urbano de residentes en las zonas rurales del municipio. La idea es realizar los servicios en «vehículos de baixa capacidade», con un máximo de nueve plazas. Esta iniciativa cuenta con financiación europea a través de la estrategia Máis Modelo Pontevedra.

Con esta financiación, el Concello está dando los primeros pasos efectivos para hacer realidad este sistema, y están en marcha dos concursos. El primero, para contratar una asistencia técnica «para o desenvolvemento dun estudo a demanda de mobilidade na zona periurbana de Pontevedra, así como para a análise e proposta de viabilidade e sostibilidade da explotación dun servizo de transporte colectivo a demanda». Es decir, para encargar el estudio previo que, explican desde el Concello, «permitirá analizar como se comporta a mobilidade sobre todo nas parroquias para poder buscar solucións acaídas, tanto no que ten que ver coa fórmula técnica pero tamén coas fórmulas legais». Este contrato salió a licitación por un importe de 102.850 euros, y en estos momentos la mesa de contratación municipal está analizando las cinco ofertas recibidas.

Aplicación informática

El segundo de los concursos convocados es para diseñar una aplicación informática específica que gestionar el transporte a demanda, que salió a concurso por un importe de 297.460 euros y contará con un plazo de ejecución de 21 meses. Se trata e una aplicación a la que tendrán que conectarse los futuros usuarios para solicitar los servicios.

La idea es que ambos contratos estén adjudicados a finales de año y que su ejecución arranque en el 2021.

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