«Paseamos fuera el nombre de Galicia»

xacobe lamas MARÍN / LA VOZ

MARÍN

RAMON LEIRO

La empresa Artesa Rías Baixas surte de pescado y marisco de calidad a varios de los mejores chefs de España. Desde Marín, Ángel González teje una red de relaciones con proveedores de todo el mundo

13 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los mejores cocineros necesitan los mejores productos. Eso fue lo que Ángel González debió de pensar cuando, hace 14 años, abrió Artesa Rías Baixas. Esta empresa, ubicada en Marín, se dedica a proveer de productos del mar de la mayor calidad a algunos de los chefs de más renombre de Galicia. Entre ellos, por ejemplo, algunos de los restauradores del Grupo Nove.

«Nosotros garantizamos la calidad gracias a nuestra experiencia de 14 años. Para eso confiamos en los mejores productores. Nos preguntamos: ‘¿Quién puede tener una de las mejores merluzas del mundo? ¿El puerto de Celeiro?' Pues Celeiro es nuestro productor», explica González. Y su experiencia va más allá de estos últimos 14 años, ya que, antes de fundar Artesa, era capitán de arrastreros, lo cual quiere decir que es conocedor del proceso de captura en todas sus etapas. Un valor añadido.

Desde el 2006 y hasta hace un año, Artesa crecía a un ritmo siempre mayor al 20 % anual. En tres lustros ha conseguido implantarse con éxito en las cuatro provincias gallegas y ahora también abastece a restaurantes madrileños, catalanes o vascos. En buena medida, ha crecido gracias al boca a boca: «Subijana pregunta a Olleros por un buen proveedor de pulpo gallego de excelente calidad y Olleros le da el nombre de Artesa. Y desde hace un año mandamos pulpo al restaurante Akelarre. No es algo que hayamos buscado, es consecuencia de nuestra labor».

Una de las claves es, sin duda, confiar en el producto propio, el gallego y de las Rías Baixas. En Artesa creen firmemente en la calidad diferencial de nuestros productos. Ángel González argumenta relatando dos anécdotas: «Uno de los mejores cocineros de Japón vino a España hace unos años. A su despedida le preguntaron cuál era el sabor que mejor recordaría y respondió que serían las ‘patas de tortuga'. Se refería, claro, a los percebes, que no conocía y le recordaron a eso». También rescata las palabras pronunciadas por Berasategui este mismo lunes en una gala benéfica que tuvo lugar en Negreira: «Galicia es el mejor destino del mundo». Viniendo de uno de los mejores chefs de España habrá que creerlo.

Vieiras con nombre y apellido

Aunque tiene proveedores por todo el mundo, Artesa se basa sobre todo en productos que adquieren al lado de casa: «La dinámica del producto de kilómetro cero es fundamental para nosotros». Pero porque lo es también para los cocineros con los que trabajan. Son ellos quienes encargan los pedidos expresamente: «El cocinero con el que nosotros trabajamos necesita que el producto tenga nombre y apellidos: la merluza tiene que ser merluza de Celeiro. La navaja tiene que ser navaja de Cíes. El pulpo tiene que ser de Bueu. Hay otros sitios de donde podrían pedir el pulpo y sería bueno, pero que sea de Bueu le da un punto de calidad extra», explica González.

¿Y el producto estrella de su repertorio? «Vendemos mucha vieira. Vieira gallega, de las Rías Baixas. La adquirimos a varias empresas de Cambados que tienen certificación de calidad, tanto sanitaria como alimentaria». Y Artesa transporta esas vieiras desde la ría de Arousa a algunos de los mejores fogones de España: «Se las vendemos a restaurantes de León, de Madrid, de Cataluña... Y a algunos de los mejores de Galicia, que incluso tienen esas vieiras como platos estandarte de sus cartas».

Antes de la pandemia, González estaba planeando trasladar sus instalaciones a una nave mayor. Ahora, el crecimiento meteórico de Artesa se ha visto ralentizado por la crisis del covid. Pero él no se desalienta: «Alrededor de la cocina, los gallegos siempre hemos encontrado ese momento especial que compartir con nuestros allegados. Y eso seguirá siendo así cuando todo pase». Y destaca la dedicación de los hosteleros que, a pesar de todo, siguen abiertos: «Ellos también son héroes».