El jugador franco senegalés es el único que no regresó a casa y apuesta por seguir en la liga española o irse a Francia
08 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Sangone Niang cumplía dos meses en Marín cuando el Gobierno declaró el primer estado de alarma. En el momento en que empezaba a coger el ritmo en el Peixe Galego y después de disfrutar de la victoria ante el Canoe, la pandemia obligó a parar la competición primero por dos semanas y a medida que aumentaban las restricciones se amplió hasta este fin de semana, mientras buena parte de los equipos pedían la suspensión de la categoría. En medio de todos esos movimientos hubo uno que se mantuvo inmóvil, con las ideas claras. Sangone Niang se quedó. Reconoce que «no volví a casa porque todavía estoy esperando la decisión oficial de las federaciones sobre si cancelarán la temporada o no». El entrenador del Peixe, Diego Gómez, señaló en más de una ocasión que era partidario de que se suspendiese el campeoanto y no retomar la competición, ya que eso supondría un nuevo período de adaptación para buena parte de sus jugadores después de un parón de mes y medio.
Pero mientras eso no se decida, Niang sigue en el piso de Marín que compartía con Taiwo Badmus, que hace pocos días que decidió regresar a su país, tal y como hicieron el resto de jugadores extranjeros y nacionales del Peixe. Antes de que las restricciones fuesen extremas, el senegalés se entretenía paseando por la playa y respirando algo de aire freso. Ahora ha cambiado sus actividades por el cine. «Para entretenerme, me dedico a ver películas», explica Niang, que reconoce que «no tengo miedo de que esto se prolongue, creo que en las próximas dos semanas todo se aclarará y espero que podamos volver a la normalidad».
Durante este tiempo ha intentado mantener las rutinas que tenía antes de comenzar el aislamiento para que, en caso de volver a la pista, no le cueste tanto. «Trato de hacer el mismo horario, pero no puedo entrar en el gimnasio para hacer ejercicio, así que intento comer sano y asegurarme de mantener mi cuerpo en forma», comenta.
Sea cual sea el futuro de la competición, el jugador franco senegalés se plantea quedarse en España, pero tampoco descarta trasladarse a Francia si «todo no funciona». Mantiene la opción, aunque su prioridad es jugar en las «ligas importantes de España después de haberme construido una buena reputación». Llegó a Marín procedente del Delteco Guipúzcoa Básquet después de iniciar la temporada en el Chocolates Trapa Palencia.